Los okupas que entraron hace dos semanas en un piso de la ronda de Nelle entregaron ayer las llaves y desalojaron el inmueble pacíficamente en torno a las 19.00 horas, como habían pactado con D.I.O. Express, la empresa contratada para echarlos. Esta cambió la cerradura e instaló una alarma.

De acuerdo con fuentes de la empresa, en este caso no se pactó una compensación económica para abandonar el piso, ya que “no hacemos acuerdos de este tipo, solo cuando se trata de una familia vulnerable que no tiene donde ir” y así lo decide el dueño de la propiedad. En este caso, los ocupantes del piso, en torno a una docena, eran todos adultos y no tenían este perfil.

Los vecinos de la zona sospechaban que en el piso (deshabitado antes de la okupación) había trapicheo de drogas, pues, según testimonios de la zona, “se ve mucho movimiento de gente a todas horas”. Los dueños del inmueble, que se enteraron de que su piso había sido okupado por vecinos y negocios próximos, también habían denunciado a la Policía Nacional.