Personal del servicio municipal de Movilidad Urbana visitó ayer el aparcamiento del Aquarium para invitar a los dueños de varias autocaravanas estacionadas allí a que se desplazasen a otros lugares de la ciudad, debido a que la saturación de este tipo de vehículos estaba causando molestias a la hora de circular por el párking. La intervención se produjo después de que el BNG presentase una pregunta escrita sobre este problema. Fuentes municipales señala que “no se echó” a los dueños de los vehículos, ya que tienen derecho a aparcar allí, pero se convenció a algunos de moverse y se “aligeró un poco” la carga del espacio.

Los nacionalistas denunciaban en su pregunta escrita que las autocaravanas estaban ocupando espacios reservados a visitantes y autobuses, y el Concello admite que las autocaravanas, de mayores dimensiones que los coches normales, causan problemas: “colapsan el párking, dificultan moverse y los giros y accesos. No lo podemos permitir, tenemos que garantizar que haya movilidad segura” señalan fuentes municipales. El BNG denunciaba también que los turistas habían generado residuos que acabaron en el estanque de las focas, pero el Ayuntamiento defiende que solo se trató de “algunos papeles” que volaron desde el estacionamiento ala piscina.

Actualmente solo existe un estacionamiento municipal para caravanas, en O Portiño, al que se derivaron “muchos” de los estacionados ante el acuario. Pero muchos usuarios de este tipo de vehículos, que van “en aumento” según el Concello, prefieren aparcar más cerca del centro, pese a que no tengan servicios.