Un hombre vecino del concello de Oleiros ha sido detenido y ha ingresado en prisión provisional acusado de ser el presunto autor de la muerte violenta del hombre que fue hallado muerto, con varias puñaladas, el pasado día 1 de octubre en el Barrio de las Flores. El detenido, con iniciales M. A. P. y nacido en 1963, fue puesto a disposición judicial este sábado. El juzgado de guardia decretó su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza por homicidio.
Fuentes policiales señalan que el detenido tenía numerosos antecedentes, varios de ellos vinculados con la venta de drogas. Las mismas fuentes apuntan que el crimen podría guardar relación con estupefacientes o deudas vinculadas con ello. Las diligencias han sido declaradas secretas por la autoridad judicial, según informó ayer la Policía Nacional, que lleva la investigación del caso.
El crimen por el que se ha detenido al vecino de Oleiros fue el apuñalamiento de Francisco Javier L.F, de unos 50 años, que había trabajado como técnico municipal de Deportes del Concello de Arteixo hasta hace unos 15 años. El cuerpo apareció con varias puñaladas, rodeado de un gran charco de sangre y con los restos de cuchillo cerca, en su vivienda de la calle Lirios. Según fuentes de la investigación, el cadáver fue encontrado por el propietario del inmueble, que se lo había alquilado, después de que otros vecinos le hubieran alertado de que no lo habían visto desde hacía días.
El domicilio de la víctima no presentaba signos de violencia, salvo una silla del comedor que se encontró tirada en el suelo y con el asiento roto, según informaron fuentes de la investigación. La mesa también estaba desordenada, de acuerdo a la información facilitada por estas fuentes, y sobre ella se encontraba un teléfono móvil.
La Policía Nacional acudió a la vivienda tras la llamada de una vecina que avisó de que el coche y la moto del hombre llevaban tiempo en el mismo lugar y que había ropa tendida desde hacía días. Los vecinos avisaron al propietario del inmueble y éste, al entrar en la casa, se encontró con el cuerpo del hombre tirado en el suelo boca abajo en medio de un charco de sangre. Ya de madrugada, la Policía Científica inspeccionó la vivienda en busca de pruebas.
