Sin emergencia sanitaria en Galicia desde el pasado 21 de octubre, ¿deben las terrazas de hostelería seguir ocupando más espacio del que les corresponde en las calles, como permitió el Concello al sector para compensar las pérdidas por las restricciones derivadas de la pandemia? De acuerdo con la prórroga de la instrucción que regula esta medida, las mesas y sillas tendrían que haberse retirado ya del espacio adicional o de las plazas de aparcamiento que han ocupado en la calzada, pero los hosteleros y el Gobierno local debatirán hoy la organización de la ocupación del suelo público con terrazas desde enero de 2022. ¿Y hasta entonces? La oposición municipal considera que los empresarios y el Ayuntamiento deben acordar de forma ordenada la manera de volver a la situación anterior a la pandemia y defienden que mientras tanto se controle de manera segura y rigurosas la colocación de terrazas.

Solo el BNG alude a una fecha concreta, 2022 —se entiende que en cuanto empiece el año—, para que las terrazas vuelven a su ubicación habitual. “Creemos que es lógico que se le dé tiempo a la hostelería para resarcirse de la merma de ingresos por culpa del COVID y las restricciones, pero tiene que ser un tiempo prudencial. Una vez que ya no hay límite de aforo, debe volverse en 2022 al escenario anterior para permitir una ocupación del espacio público compatible con otros usos y sobre todo su disfrute por los ciudadanos”, cree el portavoz nacionalista, Francisco Jorquera.

Los otros grupos son más imprecisos respecto a los tiempos, aunque demandan que la ampliación de espacios para la hostelería no suponga problemas de convivencia. “Es el momento de ir pensando en recuperar la normalidad en el uso del espacio público. Pero debe ser un repliegue planificado y de acuerdo con el sector hostelero. No desapareció el COVID como para saturar el interior de los locales ni la hostelería se recuperó al 100% del impacto económico del confinamiento, por lo que el diálogo es fundamental”, considera Marea Atlántica, que defiende también el cumplimiento de horarios y la garantía de accesibilidad peatonal a plazas y calles, aspecto en el que coincide con el BNG.

El PP, grupo que en los últimos meses ha criticado al Gobierno local por la eliminación de plazas de aparcamiento en distintos barrios a raíz de acciones vinculadas a peatonalizaciones, advierte de que “no se puede decir que hasta diciembre habrá terrazas en la calzada y seguir dando autorizaciones en noviembre cuando finalizó la emergencia en octubre”. Los populares demandan “seguridad jurídica” y alternativas a la supresión de estacionamientos con un “estudio serio en toda la ciudad”.

La concejal no adscrita Isabel Faraldo tampoco señala en qué momento se deben retirar las terrazas de los nuevos espacios en las calles donde se les ha permitido estar, pero defiende que no se desmonten aún mientras haya que seguir usando las mascarillas en el interior de los locales.

Los hosteleros de la ciudad pretenden que el Concello les permita mantener la ampliación de las terrazas en las plazas de aparcamiento y en la vía pública que les concedió durante la situación de emergencia sanitaria para intentar paliar las pérdidas generadas por los cierres y las limitaciones de aforo. Hoy tratarán de llegar a acuerdos con el Gobierno local.