La Demarcación de Costas ha aceptado la petición del Ayuntamiento de prolongar el plazo para que las familias que quedan en el asentamiento de A Pasaxe abandonen el poblado hasta el próximo 31 de enero. En un principio el organismo, dependiente del Estado, había fijado un plazo de quince días hábiles a partir de finales de noviembre, que concluiría estos días, pero el Ayuntamiento solicitó una mora para que los servicios sociales puedan garantizar que todos los residentes se vayan del lugar voluntariamente.

A finales de la pasada semana quedaban todavía seis grupos familiares en el poblado, después de que dos residentes se fuesen el viernes. Según declaró a este diario la edil de Bienestar Social, Yoya Neira, se prevé que los restantes puedan salir del asentamiento en las “próximas semanas”, y todos contarán con una alternativa habitacional.

Algunos tendrán soluciones provisionales mientras se concreta una definitiva, pues en ciertos casos se precisa tiempo para acabar obras o poner a punto la casa en la que se asentarán. Como el Ayuntamiento carece de suficiente vivienda de su propiedad para alojar a estas familias, les dará ayudas para optar a otros alojamientos.

Cuando culminen los desalojos se pondrá fin a un asentamiento chabolista de 35 años, que vio nacer a algunos de sus residentes. El poblado, surgido a la sombra de las instalaciones de la antigua Conservera Celta, fue fundado por habitantes de los barracones de A Cubela, después de que el Ayuntamiento los desalojara para proceder a la urbanización de la zona, en 1986. Los terrenos son de dominio público, y Costas pretende recuperarlos y acondicionarlos como parte de los trabajos relacionados con el dragado y la recuperación de la ría.