La cesión a una entidad de la parcela municipal de Eirís que la Xunta reclama para el realojo de los expropiados por la ampliación del Hospital de A Coruña (Chuac) se formalizó once años antes de la petición autonómica. En julio de 2010, con Javier Losada como alcalde y previo cambio en el plan general, el Ayuntamiento cedió la parcela a Aspronaga para un colegio de educación especial y una residencia para personas con discapacidad intelectual. La entidad no pudo construirlos por falta de financiación, señalaron ayer fuentes de Aspronaga, que devolvió el solar al Concello a principios del pasado verano ante el interés de otra entidad por desarrollar su propio proyecto en él. Unos pocos días después, el 2 de junio, el Gobierno local aprobó la cesión del terreno a la Fundación Monte do Gozo-Proxecto Home para un centro de asistencia a drogodependientes y la formalizó el 12 de noviembre.

Esta nueva cesión se autorizó tres meses antes de que la Xunta adjudicara el diseño de la ampliación del Chuac a la unión de empresas conformada por Pinearq, Vázquez Muíño y Monteoliva, con un plazo de ejecución de dos años. En los anteproyectos presentados por la Xunta hasta este mes de diciembre, esta parcela quedaba fuera de una ampliación presupuestada en unos 450 millones de euros con el objetivo de duplicar la actual superficie del Chuac, con obras hasta 2027.

Es la propuesta ganadora la que, “como novedad”, “incorpora al ámbito” esa parcela “para la construcción de viviendas de realojo destinadas a los propietarios de viviendas expropiadas”, según consta en la propuesta de actuación para el nuevo Chuac, que la Xunta trasladó al Concello el 13 de diciembre. El anteproyecto del nuevo Chuac prevé el derribo de 25 edificaciones, 20 de ellas de tipo residencial, así como la expropiación de al menos 30 parcelas.

En su contestación, el Ayuntamiento ha solicitado a la Xunta la “exclusión” de ese solar municipal “del ámbito de actuación” al estar cedido a Proxecto Home. Tanto el grupo municipal del PP, el lunes, como la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, ayer, reprocharon la actuación del Ayuntamiento, que no ha querido contestar hasta recibir la réplica oficial autonómica a su informe. “Es muy difícil de entender —aseguró ayer la conselleira— que el Ayuntamiento unilateralmente decidiera el futuro de una parcela cerca del ámbito del nuevo Chuac y que condiciona el futuro”. El PP exigió al Gobierno local que “concrete una parcela municipal como alternativa al realojo”.

En su plan de actuación para el Chuac, redactado por las empresas adjudicatarias, la Xunta, sin embargo, expone que, según la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana, corresponde al promotor de la expropiación “garantizar el realojo de los ocupantes legales de las construcciones que resulten a demoler”. Según el convenio firmado con el Concello, la obtención de los terrenos por expropiación recae en la Xunta, aunque la financie corresponda al Ayuntamiento.

Esta normativa estatal regula expresamente cómo debe realojarse a los expropiados en proyectos de este tipo: “Para hacer efectivo el derecho de realojamiento será preciso ofrecer una vivienda por cada una de las viviendas afectadas por la actuación, bien en el mismo ámbito de actuación, o, si no es posible, lo más próximo al mismo. Cuando no sea materialmente posible ofrecer dicha vivienda, los titulares del derecho de realojamiento tendrán derecho a su equivalente económico”.