La segunda edición de los bonos Presco, los descuentos en las compras en el comercio local financiados por el Ayuntamiento para fomentar la recuperación económica tras el COVID, finalizó el pasado 31 de diciembre tras movilizar ayudas por valor de cerca de 719.000 euros, aproximadamente un 73% de los 985.000 euros que se comprometieron para el programa municipal.

El plan de incentivos para el consumo, que según los cálculos del Concello se empleó para ventas por un valor total de algo más de tres millones de euros, empezó el pasado 15 de septiembre y se dividió en cinco líneas. La mayor, con una dotación de 400.000 euros, estaba destinada al pequeño comercio; otros 235.000 euros fueron para adquisiciones culturales, 200.000 para hostelería; 100.000 euros para estética y 50.000 euros para los taxis.

Pero la aceptación fue muy desigual. Las partidas de comercio y de estética (empleada esta última para las peluquerías y salones de belleza), se agotó completamente. En el otro extremo se encuentra el bono taxi, en el que, según fuentes municipales, quedó por distribuir “casi todo lo disponible”, y la partida de hostelería, en la que no se asignó cerca del 60% del montante.

En total, esta edición de los bonos contó con la colaboración de 710 comercios de la ciudad, y, según los cálculos municipales, un total de 50.831 vecinos descargaron las bonificaciones. Si no hay repeticiones en las cifras, son más de una quinta parte de las personas empadronadas en la ciudad.

Agotados en 39 comercios

Los bonos establecían un límite de 5.000 euros en descuentos para cada comercio, que se agotaron en 39 casos. De ellos, dos tercios fueron en establecimientos culturales, pese a que no se llegó a cubrir todo el importe de la partida destinada al sector: un total de 26 librerías, tiendas de música y comercios de fotografía.

Le siguen en importancia los pequeños comercios, cuya dotación económica sí se agotó, con nueve tiendas (entre ellas negocios dedicados al textil o a la ferrería) que llegaron a su tope. Se dieron dos casos en estética y otros dos en hostelería.

La alcaldesa, Inés Rey, destacó la satisfacción del Gobierno local con el modo en el que se desarrolló la iniciativa. Según señaló, esta “mostró el compromiso del Concello” con la recuperación económica de A Coruña y con aquellos sectores que “más sufrieron como consecuencia de la pandemia”.

El Ayuntamiento también destaca que, en esta edición, los participantes recibieron el dinero de los descuentos (que adelantan los propios negocios) con frecuencia semanal.