Aulas coruñesas 1, ómicron 0. Ese es el balance de los responsables de los colegios e institutos de la ciudad tras concluir el primer día de clase tras las vacaciones de Navidad. Finalizadas las clases de hoy, familias y comunidad educativa pudieron ver disipados los temores de las semanas previas, cuyo elevadísimo índice de contagios hizo temer por la seguridad de la vuelta a las aulas de una población que todavía no dispone de pauta completa de vacunación. “La palabra es tranquilidad”, valora la directora del Eusebio da Guarda y presidenta de la Asociación de Directores de Institutos de Galicia, Isabel Ruso.

"La percepción general es de un porcentaje de bajas de profesores de entre el 2% y el 5%. La incidencia es mínima"

Una sensación casi unánime entre los directores de los centros educativos al término del primer día, que temían un inicio mucho más atropellado. “No tenemos datos exactos, pero la percepción general es de un porcentaje de bajas de profesores de entre el 2% y el 5%. La incidencia es mínima”, asegura Ruso. En el Eusebio da Guarda, cita como ejemplo, el número de bajas del primer día, entre alumnos y profesores, asciende a únicamente dos.

El panorama se repite en otros institutos de la ciudad. “Hoy se nos han notificado únicamente cuatro casos positivos de los 555 alumnos que hay en el centro”, ejemplifica el vicedirector y coordinador COVID del instituto Agra do Orzán, Eduardo Patiño. No son cifras llamativas, aunque, admite, todavía es pronto para evaluar si se mantendrán o experimentarán un pico con el avance de las semanas, como ya ocurrió el año pasado por las mismas fechas. “El año pasado, curso 2020/2021, tuvimos tres casos en el primer trimestre, y 19 solo en el mes de enero. La experiencia de la vacunación lo cambia todo, y, aunque el brote de ómicron parece muy contagioso, creo que nos mantendremos, pero a ver qué pasa estas dos semanas”, señala Patiño.

“Hoy se nos han notificado únicamente cuatro casos positivos de los 555 alumnos que hay en el centro”

Los protocolos, con la nueva variante, mucho menos virulenta que las precedentes, y con el escenario de la vacunación, también han cambiado: si antes se clausuraban aulas enteras por la presencia de positivos, el nuevo protocolo establece que debe haber, al menos, cinco alumnos contagiados o el 20% de un aula para mandar a los estudiantes a casa. Los métodos de detección, juzgan los docentes, también han evolucionado tras año y medio de ensayo-error. “La aplicación Educovid facilita mucho las cosas. Cuando un alumno da positivo, nos sale inmediatamente en la aplicación. Así es mucho más fácil notificar contactos. A veces, nos enteramos nosotros antes que las propias familias”, asegura Patiño. En los centros de educación Infantil y Primaria, en los que existía cierta inquietud en los últimos días por cómo se desarrollaría la vuelta a las clases, con la vacunación infantil todavía en proceso, la idea de tranquilidad se repite.

“La incidencia es muy baja. En mi centro hay dos profesores de baja, y tres alumnos de 260, que otros años serían bajas por gripe. Los centros son espacios seguros, todo se ha desarrollado dentro de la normalidad”, juzga Antonio Leonardo, presidente de la Asociación de Equipos Directivos de Centros Públicos y director del colegio Curros Enríquez, que asegura que, aunque todavía es pronto para contar con datos que dibujen un horizonte más claro, las cifras del primer día dejan espacio a la tranquilidad. “En A Coruña, hay centros en los que hay dos profesores de baja, en otros uno y en otros ninguno. No se puede generalizar, pero lo que nos llega es esto”, indica. “Tenemos dos casos confirmados entre personal y alumnado. Había cierta preocupación, pero la incidencia es bastante residual”, corrobora Sandra Chaves, directora del colegio Labaca.

Bajas y nuevo protocolo

Los directores de los centros coruñeses participaron ayer en una reunión convocada de urgencia por la Consellería de Educación para informar a la comunidad educativa de las modificaciones en el protocolo COVID para la vuelta a las clases en plena sexta ola.

El nuevo documento no incluye cambios significativos con respecto a las medidas previas a las vacaciones de Navidad, e insta a reforzar actuaciones preventivas, como el correcto uso de las mascarillas, la distancia de seguridad entre el alumnado y la ventilación cruzada. El protocolo establece, además, el procedimiento si se detectan casos positivos en un aula. “Esta semana va a haber una formación COVID, en la que se nos ha ofrecido hacer una serie de preguntas. Hay una atención personalizada a nuestras dudas, esperamos seguir por ahí”, señala Isabel Ruso.

"Las bajas de profesores se están cubriendo de un día para otro"

La cobertura de posibles bajas del cuerpo docente, circunstancia que preocupa en los centros, es otra de las coyunturas que la Consellería ha asegurado tener entre sus prioridades. “A nosotros nos llegó la confirmación de un positivo a las 12, y ya tenemos quien cubra la baja mañana. En otros centros ocurre lo mismo, nos comentan que se están cubriendo de un día para otro. Va a salir en el portal de la Consellería un sistema para agilizar la petición de bajas por positivo. Creemos que no habrá problema”, asegura Ruso, que insiste en la importancia de asegurar la presencialidad en los centros y de afrontar lo que queda de curso con tranquilidad. “Hay que mandar un mensaje de ánimo a todos. La situación es compleja y no podemos trivializarla, pero cabe el optimismo”, concluye.