El Enterro da Sardiña que organizó la Asociación de Veciños Santaia de Santa Cruz (Oleiros) el pasado sábado fue todo un espectáculo de disfraces, ingenio y humor. La banda de música de Santaia acompañó a los cabezudos, las plañideras y el cura en el entierro. En la procesión fueron muchos carteles de No a la Guerra, uno de ellos portado por un virus COVID gigante. No faltaron alusiones a un BenidorTongo Fest, el Rey Emérito y la separación de Urdangarían y la Infanta Cristina.
