Ganaderos gallegos se concentraron este lunes frente a la Delegación del Gobierno para protestar por el “bloqueo” que padecen a consecuencia del paro del transporte y para exigir al Ejecutivo central “garantías absolutas” en la recogida y salida de la producción de las industrias hacia los puntos de venta. El delegado del Gobierno, José Miñones, los recibió y les garantizó corredores y acompañamiento de fuerzas de seguridad para realizar los transportes.

El secretario xeral de Unións Agrarias de Galicia, Roberto García, y el presidente de Federación Gallega de Productores de Porcino, José Antonio Vidal, trasladado la “gravedad de la situación, pero sobre todo la urgencia de soluciones”. Agricultores y ganaderos no pueden “ser rehenes” de la gestión que haga el Gobierno y la asociación de transportistas de un derecho de huelga, según explicó García.

“De la reunión salimos sin soluciones”, sentenció García, que reconoció “cierta empatía” por parte del delegado cuando le trasladaron la “especificidad” del sector, un modelo de explotaciones que “no puede esperar soluciones para dentro de 48 horas”. Según declaró a los medios a la salida del encuentro, actualmente “no cabe esperar” por lo que han exigido, “siendo respetuosos con los derechos de los transportistas”, que se “normalice” el reparto de pienso en las explotaciones y que funcionen los mataderos para poder sacar animales que llevan “bloqueados varios días”.

El representante sindical explicó que se trata de un “problema de ciclo vital”, ya no solo de abastecer a la población de carne, sino de que en la propia explotación quede espacio para los animales que están naciendo. “Los transportistas no nos pueden hacer rehenes de sus derechos”, insistió Roberto García, quien explicó que los ganaderos teniendo los mismos problemas, “o más graves”, no hacen rehenes “ni a los ciudadanos ni a ningún otro colectivo”.

El secretario general de UUAA señaló que Miñones “comparte” su preocupación y les comunicó que “cualquier empresa” que tenga un problema para sacar su producto tiene “disponibilidad de poner a su servicio” las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, como así confirmó la Delegación del Gobierno, que ratifica 2.000 efectivos a disposición, que ya han hecho 900 acompañamientos. En este sentido, García declaró que este servicio “hasta ahora no fue operativo por miedo de los transportistas de las empresas a represalias o porque estén en una huelga encubierta”.

Roberto García añadió también que espera que se habiliten “formas de negociación con los que no están en la mesa de transportes” porque para los ganaderos agricultores ya no tiene margen “ni económico ni de tiempo”. “Cualquier solución que no sea en las próximas 24 horas, llegará tarde” , afirmó.

El representante de Unións Agrarias detalló que en este momento la “única empresa que de forma oficial” no recoge la leche es Nestlé, que tiene una recogida de en torno a 200 explotaciones. Las principales empresas, Central Lechera Asturiana —800 ganaderos—, Lactalis —1.200 ganaderos—, Celta —400—, Leche Río —400 ganaderos— siguen recogiendo “con dificultades”. Esta situación “es compatible” con que ganaderos de estas industrias en esa rotación de recoger cada 48 horas no llegaran a tiempo y “tuvieran que tirar un ordeño”, indicó.