El 80% de las obras para la ampliación del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) estarán terminadas en tres años, según las previsiones de la Xunta. El presidente Alberto Núñez Feijóo, avanzó ayer que la construcción de viales, el hospital de pacientes, las nuevas fachadas, las expropiaciones, el nuevo edificio hospitalario, el acceso a urgencias y el pabellón de docencia e investigación estarán listos en 2025, según sus cálculos, aunque todavía se están finalizando los trabajos de la última fase del plan director de 2001. Después quedarán las consultas externas y la remodelación interior y exterior del edificio actual, que podría llevar dos años más.
El proyecto de ampliación del Chuac, del que se encarga la UTE Pinearq-Vázquez Muiño-Monteoliva, hará que el complejo hospitalario pase de una superficie de 85.000 a 255.000 metros cuadrados. Según explicó uno de los responsables de la obra, el hospital tendrá un gran patio central que dará acceso a todos los bloques, construidos de forma escalonada para mantener la vista a la ría. Se mantiene el edificio existente y se creará un nuevo hotel de pacientes, además de un edificio administrativo. Al otro lado del jardín se levantará el nuevo edificio, además del vestíbulo y un pabellón de docencia e investigación que conectará con el hospital a través de una pasarela. Esta se instalará sobre una plaza peatonal a la que tendrán acceso autobuses, taxis y ambulancias.
Habrá, además, zonas verdes, sendas peatonales y ciclables, cafetería, auditorio, locales comerciales y capillas. Para mejorar la movilidad, se prevé crear un anillo central con varios accesos. También tendrá dos aparcamientos subterráneos. Entre los diferentes edificios dentro del complejo, habrá conexiones internas y se facilitará el tránsito con escaleras mecánicas.
La Xunta destina 430 millones de euros a este proyecto, integrado en el paisaje, que presenta fachadas orientadas al este y oeste para garantizar la luz en las habitaciones todo el día, edificación escalonada y vegetación en todo el conjunto. Además, es eficiente energéticamente. El Concello aportará 26,3 millones de euros a esta obra, de los que más de diez servirán para ejecutar las obras de los accesos viarios al nuevo hospital, así como la remodelación del entorno.
“Este hospital marcará un antes y un después en esta ciudad. Está hecho a medida de las personas”, informó el presidente de la Xunta, quien detalló que se hará un incremento de camas del 15%, se habilitarán 40 quirófanos y 500 consultas externas. Tanto el Oncológico como el Materno se integrarán en este espacio.
La alcaldesa, Inés Rey, destacó la “capacidad de entendimiento entre Administraciones”, y avanzó que están elaborando el convenio para definir las obligaciones de los agentes implicados en el proyecto. Feijóo recordó que tendrá que “coexistir la actividad asistencial con las obras”, pero, anunció, “merecerá la pena el esfuerzo”. Las obras se podrán ejecutar de forma simultánea o independiente, en función de las necesidades del momento. ”Tendremos un hospital más grande, integrado en el paisaje y con mejor accesibilidad”, resumió el presidente del Gobierno gallego. El Chuac ya está en obras, con una fase 0, como denomina la Xunta, que finalizará en verano si no hay retrasos por la escasez de material. Son los trabajos que corresponden, en realidad, a la fase 3.1 del anterior plan director de 2001 y que nunca llegó a completarse. Incluyen la creación de una nueva planta de hospitalización y la ampliación de las Urgencias, del servicio de farmacia y de las camas UCI.
Protestas de expropiados y sanitarios
Los expropiados por la ampliación del hospital y un sector del personal sanitario aprovecharon la visita del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y otras autoridades para manifestar su malestar por la situación. La plataforma de afectadas por la ampliación del Chuac mostró su rechazo a este proyecto con una pancarta que decía “Menos cemento, más personal”. Los afectados llevan meses criticando la ubicación escogida para la ampliación del complejo hospitalario y siguen a la espera de saber el número exacto de viviendas expropiadas. De momento, son 27. Además, una representación del personal sanitario esperó a Feijóo para criticar la falta de recursos. “Nós cumprimos, vos non”, fue uno de los lemas utilizados. Protestan por la falta de recursos humanos y los problemas para conciliar. “Non a precarización dos contratos”, decía otro de los carteles.
