La Empresa Municipal Vivienda Servicios y Actividades (Emvsa), propiedad del Concello, recibirá este año unos 873.000 euros del Ayuntamiento a través de una ampliación de capital para compensar “los déficits acumulados” entre octubre de 2016 y el 30 de septiembre de 2020 por encomiendas a pérdida del Concello, si bien esto supone solo algo más de la mitad del descubierto. De acuerdo con un informe de su director general, hasta finales del año pasado la gestión del servicio de BiciCoruña, la gestión de multas y la fábrica de armas había causado pérdidas a la empresa de 1,6 millones.
De hecho, el director general, Jaime Castiñeira de la Torre, pedía una ampliación de capital de aproximadamente 1,25 millones de euros para “solventar las dificultades de tesorería” que deriva de que la empresa pública tenga que asumir encargos del Ayuntamiento que no están remunerados (el servicio de BiciCoruña y la gestión de la Fábrica de Armas) y el de la gestión de multas, cuya remuneración “es insuficiente”.
Para este año, según aprobó ayer el consejo de administración de la entidad como parte del programa anual de actuaciones y financiación para el ejercicio 2022, se prevé ingresar por multas 350.000 euros. Pero, según figura en el informe de gestión del año pasado, desde 2016 hasta 2021 los gastos han superado a los ingresos en conjunto, causando un déficit de cerca de un cuarto de millón.
Emvsa realiza gratis la gestión de BiciCoruña y la fábrica de armas.
Por comparación, por el servicio de gestión de viviendas sociales el Ayuntamiento paga otros 600.000 euros, la mayor partida de ingresos de la empresa municipal. En conjunto, contando subvenciones, pagos por servicios y la ampliación de capital, el Concello le aportará algo más de dos millones de euros este año a Emvsa.
La sociedad arrastra otras cargas. Entre las principales está una deuda de cerca de 2,7 millones de euros con Abanca, procedente de la extinta Caixa Galicia y relacionada con el aparcamiento de Matogrande, por la que este año tendrá que abonar 423.000 euros.
Finalización del polideportivo
El programa de actuaciones incluye la encomienda por parte el Concello de que Emvsa se ocupe de la “dotación y equipamiento” del polideportivo de O Castrillón, algo a lo que se destinarán algo más de 645.000 euros. Según señala Marea, que apoyó la aprobación del programa en el consejo de ayer, las actuaciones de este año permitirán la inauguración de una infraestructura por la que el barrio “lleva una década” aguardando, en referencia a las obras, adjudicadas en 2013.
La espera es incluso más larga, ya que fue en 2003 cuando por primera vez se prometió, en el programa electoral de los socialistas. Las obras se fueron retrasando y no hubo un contrato para redactar el proyecto hasta 2008.
En 2013, ya con el PP en el Gobierno local, se adjudicó el proyecto con una oferta de 2,8 millones sobre un presupuesto de licitación de cuatro. En 2015 empezaron las obras para levantar la estructura. En un principio los equipamientos correrían a cargo de una concesionaria futura, pero Marea lo asignó a Emvsa.
La obra se adjudicó en 2020, ya con el PSOE al mando del Concello, y el año pasado hubo que reforzar la piscina debido a una deformación durante el sellado. Se espera que la obra acabe, al fin, este año.
Votos en contra de PP y BNG
En el consejo de administración de Emvsa están representados los grupos del pleno municipal, si bien no en las mismas proporciones que en este: tienen voto tres ediles del PSOE, entre ellas la alcaldesa, Inés Rey, tres del PP, dos de Marea y una del BNG, además del secretario del consejo. En la sesión de ayer votaron en contra del programa de inversión el PP y el BNG, y a los socialistas les faltaba el exedil de Urbanismo, Juan Manuel Díaz Villoslada, que renunció recientemente. El documento se aprobó con el voto de calidad de la alcaldesa.
Marea señaló que el BNG y el PP no presentaron una enmienda al texto y les critica poner “en riesgo el refuerzo de políticas públicas que mejoran la vida” de los vecinos. La formación destacó que el plan de actuación contempla un aumento del 30% en los fondos de la bolsa de viviendas para alquiler social, que ampliará su alcance de las personas en extrema vulnerabilidad “para llegar también a mayores y a la juventud”.
Los fondos de la bolsa de vivienda para alquiler social suben en un 30%.
El grupo señala que esta iniciativa forma parte del acuerdo con el Gobierno local para la aprobación de los presupuestos de este año, e insta al Concello a poner en marcha las nuevas medidas “cuanto antes”. Es un paso, señala Marea, para “conseguir que Emvsa comience a actuar como una verdadera empresa municipal de vivienda”.
La edil del BNG, Avia Veira, señala que votó en contra por la reducción de la ampliación de capital en relación a la cantidad que pidió el director general, que ocupa su puesto por “decisión del Concello” y que “de hecho dijo que serían insuficientes esos 1,2 millones”.
El BNG solicita que el consejo de administración vea “una relación de los gastos de ingresos de las encomiendas de gestión” y decida cuáles debe asumir la empresa, que debería perder, piensa, la gestión de las multas. “Creemos que Emvsa se tiene que responsabilizar sobre todo de la política de vivienda y dejar de ser un cajón de sastre en el que caen encomiendas deficitarias”, defiende.
Por su parte, el Partido Popular señala que propuso en la reunión de ayer que el Gobierno municipal “active la búsqueda urgente de viviendas para refugiados ucranianos que llegan a nuestra ciudad”.
