“No fue el escritor que busca al personaje, sino el personaje que de repente aparece en el camino del escritor —comenta Josep Bosch (Girona, 1951) sobre su descubrimiento de Sofía Casanova—. Inmediatamente me pareció un buen tema para una biografía y he dedicado algo más de dos años a escribirla”
.¿Qué trata de aportar Sofía Casanova. Corresponsal en dos guerras mundiales respecto a anteriores biografías sobre la poetisa y escritora coruñesa?
Hay estudios muy amplios y profundos de la vida de Sofía Casanova, sobre todo uno de Rosario Martínez Martínez, pero creo que la diferencia es que yo le he dado un enfoque periodístico. Es un reportaje histórico más que un análisis filosófico o literario del personaje. He sido periodista y corresponsal en varios países extranjeros y por tanto fue fácil para mí identificarme con algunos episodios de su vida de reportera.
¿Por qué su figura cayó en el olvido? ¿Tuvo que ver en ello su decidido apoyo al bando nacional en la Guerra Civil?
Es una pregunta difícil de responder para mí porque yo no conozco bien la sociedad gallega. Me cuesta entender que la razón sea que fue una persona “políticamente incorrecta”, como se dice ahora. La historia de Galicia y de España entera está llena de personas a las que se han disculpado sus posturas políticas del pasado. Por otra parte, hay que entender el contexto histórico en el que Sofía Casanova vivió para entender muchas cosas. Sobre todo, sus vivencias durante la Revolución rusa y su gran desilusión con los bolcheviques, que condicionaron enormemente sus opiniones y sus posturas posteriores con respecto a la Guerra Civil española y la Segunda Guerra Mundial. Creo que a una persona que tuvo una vida tan intensa y tan llena de convulsiones hay que contemplarla y juzgarla en su conjunto. En tal sentido, lo que hizo Sofía Casanova desde el punto de vista periodístico y humanitario es encomiable.
¿Cree que en el libro se pueden encontrar paralelismos con lo que está ocurriendo en Ucrania?
Los paralelismos son enormes y muchas de las opiniones que expresó Sofía Casanova en su época sobre Rusia valdrían ahora. Ella vivió la época en la que Rusia ocupaba parte de Polonia porque los rusos la consideraban territorio histórico que era propiedad de los zares. Y cuando Rusia se replegaba debido a una guerra, en su mentalidad seguía la idea de recuperar el imperio perdido. Algo que ahora está en la mente de Vladímir Putin, si interpretamos sus propias palabras. No me extraña la angustia con que Polonia y otros países vecinos de Rusia, sobre todo las repúblicas bálticas, están contemplando la invasión de Ucrania.
