El Gobierno local ha reconocido al BNG, en una pregunta escrita formulada en la anterior sesión plenaria, que carece de un proyecto para el edificio de las cocheras de tranvías y para los vagones del antiguo servicio de transportes, a pesar de que el tranvía dejó de funcionar en 2011, tras sufrir el descarrilamiento de un vagón.

El BNG propone al Gobierno local que se reúna con el tejido asociativo del barrio de Monte Alto, en el que se encuentra el edificio de las cocheras, para determinar el uso futuro de este espacio.

La concejala del BNG, Avia Veira, preguntó al Gobierno local si la Compañía de Tranvías, que es la titular de la concesión, había entregado ya al Ayuntamiento tanto las cocheras como los vehículos del servicio, ya que son de propiedad municipal y el servicio se liquidó en la Junta de Gobierno Local celebrada el 14 de diciembre de 2020.

“No existen por ahora planes para el edificio ni para los tranvías”, contestó el Gobierno local a la pregunta del BNG, que sí admitió que la Compañía de Tranvías había ya entregado tanto las instalaciones de las cocheras como los vehículos al Ayuntamiento.

El Concello renunció ya a volver a poner en funcionamiento el servicio de tranvías y ha optado por ir tapando los raíles en las zonas en las que se ha intervenido urbanísticamente, como en la zona del paseo marítimo entre la fuente de los Surfistas y el colegio de las Esclavas, también en la zona del castillo de San Antón. Un juez condenó al Concello —tal y como adelantó LA OPINIÓN a principios de este mes— a indemnizar a un conductor que sufrió un accidente de coche al resbalar con los raíles del tranvía en 2019, porque tras tantos años de inactividad, considera que el Concello no cumplió con su obligación de mantener las vías públicas en las “condiciones adecuadas y necesarias para garantizar la seguridad de los vehículos en la circulación” al mantener “un elemento innecesario y de riesgo en la calzada”.

La compañía balear El Ferrocarril de Sóller mostró en varias ocasiones su interés en adquirir algunos vagones del antiguo tranvía turístico. Desde 2015 y hasta 2019, la firma se puso en contacto varias veces con la Compañía de Tranvías para hacerle saber que estaba interesada en comprar repuestos y maquinaria de sus talleres para ampliar su flota de tranvías. Incluso una delegación de la firma de Mallorca viajó en 2019 a la ciudad para conocer el estado de los automotores eléctricos coruñeses, aunque finalmente, las partes no llegaron a acuerdo. Para entonces, el Concello todavía no había decidido si iba a retomar el servicio, aunque actualmente ya se han tapado parte de los raíles.