La Opinión de A Coruña

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La obra en la fachada del cine París obliga a actuar en carpinterías, marcos y barandillas

Urbanismo pone condiciones a la reforma para cambio a uso hostelero, aún sin licencia

El cine París, tras el cierre de Pull and Bear. | // VÍCTOR ECHAVE

La comisión asesora del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) de Ciudad Vieja y Pescadería aprobó en el primer trimestre de este año el proyecto de recuperación de la fachada del cine París que los nuevos inquilinos del inmueble deben ejecutar antes de obtener el cambio de uso que necesitan para la puesta en marcha de un local de hostelería. El órgano municipal informó favorablemente de la documentación presentada por los promotores, aunque en su dictamen establece tres condiciones que deberá cumplir la reforma: las carpinterías tendrán que ser de madera pintada; los marcos exteriores de los huecos serán idénticos a los del resto del edificio; y las barandillas no podrán ser de cristal.

La comisión del Pepri emitió otro dictamen en el mismo periodo en el que advertía a los inquilinos, la sociedad Urban París Real Ocho, de que si quería reformar el edificio para adaptarlo al nuevo uso debería, entre otras intervenciones, recuperar “la composición y las características originales” de la fachada. El segundo dictamen, emitido a raíz de la respuesta de los promotores a la comunicación del primero, es más concreto e indica al menos tres aspectos de los trabajos, además de recordar los requisitos de la reforma en el interior del edificio.

Al ser el cine París un inmueble protegido, la normativa del Pepri señala que en edificios catalogados se autoriza “exclusivamente carpintería exterior de madera pintada sin que se permita la sustitución de la existente por otra de aluminio u otro material”, requisito que apunta la comisión . Deberá haber también homogeneidad en el diseño de los marcos y las barandillas no admiten otro material que no sea cristal.

La comisión añade que el proyecto de nueva actividad en el cine París debe ser “coherente con el proyecto arquitectónico” y establece que en el interior del edificio deben quedar definidas las instalaciones de “ventilación, extracción, aislamiento acústico, protección contra incendios, definición de las distintas zonas de uso, saneamiento, conexión de este con la red general y disposición de mobiliario y aforo previsto”.

Pull and Bear dejó el cine París el verano pasado y poco después trascendió que un grupo hostelero preparaba la apertura de un local. Pidió licencia para hacer la reforma interior y exterior a finales de septiembre, pero el Concello aún no se la ha otorgado. Sus responsables preveían reabrir el cine con nuevo uso en primavera, pero en la actualidad se desconoce cuándo.

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