La modificación del plan general en el sector que va desde la playa de Oza hasta el límite con el municipio de Culleredo en A Pasaxe es una de las iniciativas urbanísticas de mayor relevancia en este mandato. El Gobierno local presentó el pasado febrero la nueva ordenación propuesta para la zona, en la que se suspendió la concesión de licencias de construcción mientras se completa la tramitación, que ahora se encuentra en el periodo de información pública.
Para sacar adelante este cambio urbanístico, el Ejecutivo socialista necesita los votos de Marea Atlántica, la única fuerza de izquierda que le permite alcanzar la mayoría en el pleno. Pero este grupo es precisamente el único que por el momento ha presentado alegaciones al documento planteado por el Gobierno local, que además son de gran calado y afectan a uno de los enclaves más sensibles, el solar de los antiguos Astilleros Valiña. La alternativa de los socialistas es un pacto con el Partido Popular, con el que las relaciones han sido prácticamente inexistentes durante el mandato.
“El Gobierno municipal no nos ha llamado para este asunto como para ningún otro, ni siquiera los temas de ciudad, a pesar de que nuestros votos son los que han permitido aprobar los convenios y tramitación urbanística de temas tan importantes como la estación intermodal o el Nuevo Chuac porque ninguno de sus socios progresistas votó a favor”, explicó ayer el PP a este periódico. Los populares reprochan además a los socialistas haber elegido a Marea “como socio de gobierno”, lo que consideran como “lo peor que le podía pasar a la ciudad porque, entre otros motivos, ha marcado unas lineas rojas que tiene paralizados temas tan importantes como los terrenos del puerto”.
Aunque la nueva ordenación para el borde de la ría prevé una reducción de 633 a 241 en el número de viviendas que autoriza el plan general, para Marea “no es suficiente”, en especial en Astilleros Valiña, ya que frente a las 111 viviendas que se pueden construir ahora, la propuesta permite 81, lo que este grupo califica de “un volumen exagerado” que además “tendrá un enorme impacto visual y paisajístico”. La formación entiende que esa ocupación residencial “no está justificada atendiendo a consideraciones ambientales, paisajísticas, culturales e incluso patrimoniales”, ya que allí se encuentra el núcleo marinero de As Xubias de Abaixo, como destaca la portavoz de Marea, María García.
El propio Documento de Evaluación Estratégica del cambio urbanístico justifica la reducción de la edificabilidad en todo el sector con una argumentación que para Marea es “incoherente” con la propuesta para los terrenos de Valiña. El grupo relaciona esta iniciativa con las de As Percebeiras, O Portiño y San Amaro, en las que denuncia los intentos de levantar “mamotretos” sobre la base de “una estimación de crecimiento de población desproporcionado y obviando las casi 20.000 viviendas vacías que hay para rehabilitar en A Coruña”. García recuerda que As Xubias es una de las “escasísimas zonas que quedan en la ciudad libres de la voracidad del cemento”.
Las alegaciones de Marea reclaman que esta modificación del plan general sea sometida a una evaluación ambiental ordinaria, con una tramitación más amplia que la simplificada. Para respaldarla, destaca que la propuesta para la ría es “contraria a la mitigación y adaptación al cambio climático” y que incumple los criterios estratégicos de desarrollo urbano sostenible.
“Basta ya de proyectos anacrónicos basados en los pelotazos urbanísticos”, proclama García, que recuerda el rechazo vecinal a los grandes proyectos inmobiliarios en esta zona del municipio.
