Los fondos europeos que la ciudad recibirá para su destino a proyectos ambientales llevan al Concello de A Coruña a comprometerse a lograr en 2030 la neutralidad climática, que hará que se igualen las emisiones de gases contaminantes con su eliminación natural. Este compromiso figura en la Declaración Atlántica, suscrita por la alcaldesa, Inés Rey, y presentada en el foro que la organización Ciudades Atlánticas —formada por localidades de Irlanda, Reino Unido, Francia, España y Portugal— celebró los dos últimos días en San Sebastián.
La declaración, también respaldada por San Sebastián, Biarritz, Gijón y Viana do Castelo, propone reducir las emisiones de gases de efecto invernadero mediante políticas de descarbonización, de movilidad urbana sostenible y de urbanismo “verde”. Las ciudades firmantes se plantean que los fondos europeos actúen como “aceleradores” de este proceso y pretenden trabajar en común mediante el establecimiento de un programa de actuaciones para proporcionar una mayor protección a las ciudades y a sus habitantes frente al cambio climático.
Estrategia local
Inés Rey expuso en el foro de Ciudades Atlánticas la experiencia de A Coruña en este campo dentro de la sesión dedicada a la transformación urbana como consecuencia del cambio climático. “Disponemos de una estrategia local contra el cambio climático basada en la movilidad y en la reducción de emisiones”, manifestó la alcaldesa, quien mencionó la política municipal de reducir el espacio destinado a los vehículos de motor en favor de los peatones, así como la reducción de emisiones contaminantes mediante la creación de un operador energético municipal.
Otra de las medidas que se pondrán en marcha es la renovación integral de la iluminación pública, iniciativa a la que se dedicarán 30 millones de euros para sustituir las actuales lámparas por otra con tecnología LED e intensidad regulable por tramos horarios, lo que permitirá lograr un importante ahorro de energía. Rey destacó además la anticipación de A Coruña a la implantación en toda España de la limitación de la velocidad a 30 kilómetros por hora en las calles de un solo carril.
“En tres años de mandato ganamos 35.000 nuevos metros cuadrados”, refirió la alcaldesa sobre los espacios obtenidos para los peatones mediante la peatonalización, que suman ya 35 actuaciones y una inversión de 7,5 millones de euros. La Ronda Peatonal es una de estas iniciativas, que pretende crear un itinerario de 3,5 kilómetros de longitud a través de varias calles que se adaptan para que los peatones tengan prioridad sobre los vehículos y del que ya se completaron siete tramos.
Rey citó también la existencia de más de 50 kilómetros de carriles bici y vías ciclables, a lo que se une la inminente renovación de la flota de bicicletas municipales, de las que el 30% serán eléctricas, mientras que las estaciones en las que pueden recogerse y devolverse se ampliarán hasta las 55 y se distribuirán por todos los barrios de la ciudad.
