Sepias nacidas en el Aquarium Finisterrae se exhiben estos días en el tanque cilíndrico del museo, ya que esta época es la de reproducción de la especie, cuyos machos cambian su coloración para el galanteo con las hembras y muestran rayas parecidas a las de las cebras. Las sepias destacan por su gran capacidad para camuflarse cambiando el color y la textura de su piel mediante unas células que les permiten tomar el color del entorno para pasar inadvertidas.