La banda indie argentina Bándalos Chinos visita hoy el Garufa a las 21.30 horas, de la mano de la iniciativa Son Estrella Galicia, con un disco nuevo bajo el brazo, The big blue, y una gira en ciernes con la que buscarán conquistar al público español.

Iniciaron su gira española nada menos que en el escenario del Primavera Sound. ¿Qué tal les han acogido?

Estamos gratamente sorprendidos con el recibimiento que hemos tenido hasta ahora en España. Nuestro primer concierto fue espectacular, en Barcelona. Es un destino muy turístico; y en el concierto hubo gente de todo el mundo, local y latinoamericana, lo que para nosotros fue una gran sorpresa. Se puede armar algo lindo en esta gira.

El indie, en España, se ha transformado en un género de masas. ¿Ocurre también en Argentina?

Sí. El indie empezó siendo quizás un modelo de gestión, una manera de hacer las cosas, y eso se terminó convirtiendo en un género musical. Me da la sensación de que ahora se está volviendo a dar la vuelta otra vez, y ya no importa tanto el modelo de gestión, sino la música, que tampoco es ya ese modelo de música alternativa. Nosotros vemos que esto se mueve, y no nos gusta casarnos con ninguna etiqueta. Está creciendo mucho. y nosotros tenemos la suerte de estar viviéndolo.

Y del macroescenario del Primavera Sound, a la sala Garufa, en un formato más íntimo. ¿Qué prefieren?

Nos gustan las dos opciones. El festival te da la oportunidad de que te vea gente nueva, que igual no compraría un boleto para ir a verte pero que tiene la oportunidad de engancharse si le gustas. Tiene la magia del show propio, la gente está ahí porque quiere escuchar tus canciones, están para vivir un concierto más largo. En el Primavera hicimos un show más reducido, con un tiempo limitado; pero en los festivales puedes cruzarte con otros artistas, lo que es nutritivo para nosotros.

Nicky Nicole, Bizarrap, Nathy Peluso, Duki, ustedes... ¿qué está ocurriendo en la escena musical argentina, que domina el panorama?

Estando tan adentro cuesta verlo, me gustaría que pasasen los años y ver en perspectiva lo que pasó, pero sí que es verdad que hay un movimiento de artistas nuevos en Argentina que está pisando muy fuerte a nivel global en todos los géneros. Responde un poco al tema de la libertad de los festivales independientes y la libertad con la que se empezó a trabajar en Argentina. Hay menos prejuicios, hay un público más tolerante con cualquier tipo de expresión musical. Eso generó comunidad entre los artistas, y estas comunidades se cruzan. Algo está pasando, es evidente.