La noite meiga regresó el pasado jueves a la ciudad para colmar las ansias de los coruñeses, que echaban de menos su fiesta favorita del año tras dos años de parón. Algunos, como Asun, quisieron honrar a las tradiciones más arraigadas del San Juan coruñés y lo celebraron entre fuego y sardinas. Y como la procesión va por dentro, pero también se lleva por fuera, los lectores que así lo desearon pudieron hacerlo ataviados con las camisetas conmemorativas de LA OPINIÓN. Asun lo hizo a lo grande y adquirió una treintena de ejemplares para sus allegados.
