La Opinión de A Coruña

La Opinión de A Coruña

Valladolid y Barcelona, ejemplos para los bajos vacíos en A Coruña

Cuentan con ayudas y bolsas de alquiler para revitalizar los locales | El Concello dispone de 3 millones para este plan, pero sin avances

Bajo vacío de un antiguo bar en A Falperra. // CARLOS PARDELLAS

Con más de 400 bajos vacíos en la ciudad, según datos municipales, A Coruña tiene que dar un paso adelante para acabar con este problema que ensucia y oscurece los barrios. Hay emprendedores con iniciativas que convierten estos lugares a pie de calle en lavanderías, locales de ensayo o pisos de alquiler turístico. Pero se necesita algo más. Los programas que desarrollan los Ayuntamientos de Valladolid y Barcelona pueden servir como ejemplo: ayudas para poner en marcha negocios, bolsas de alquiler y observatorios para analizar la situación. El Gobierno local tiene un plan parecido, propuesto por Marea Atlántica, pero no lo ha puesto en marcha. Tan solo tiene un mapa de bajos vacíos que está sin actualizar desde mayo. Sin embargo, el presupuesto de 2022 cuenta con una partida de tres millones de euros para crear un banco de bajos en alquiler, comprar locales y subvencionar actividades.

El proyecto se llama Mover os baixos y, de momento, está paralizado. Es uno de esos 40 acuerdos a los que llegaron PSOE y Marea para la investidura de Inés Rey y que forma parte de las cuentas de 2022. La idea se basa en crear una bolsa pública de locales disponibles, con precios razonables y garantías para propietarios y arrendatarios. El Concello, además, compraría locales para transformarlos en equipamientos públicos de proximidad y destinaría ayudas para que pequeños empresas y autónomos pongan en marcha sus actividades.

Es muy similar a lo que ocurre en Valladolid, donde cuentan con dos millones de euros para la compra de bajos. Los propietarios privados también pueden ofertar sus locales en una bolsa de alquiler. Valladolid también amplió el Observatorio Local del Comercio para estudiar el problema de los bajos vacíos y aportar soluciones.

Barcelona también puede ser un ejemplo para A Coruña, pues el Ayuntamiento ya ha comprado locales a pie de calle para ofrecerlos en alquiler social para diferentes iniciativas. Tiene ayudas de entre 20.000 y 6.000 euros para mantener comercios o crear nuevos. Dispone también de un programa para alquiler de bajos, casi idéntico al que pretende hacer el Ejecutivo local. Y, como Valladolid, tiene un observatorio dedicado a analizar los datos reales de locales vacíos.

Según fuentes municipales, en A Coruña había 451 antes del verano, sobre 210 menos que el año anterior, aunque Marea Atlántica asegura que en 2021 eran 755. Incluso la asociación de empresarios Ascega señalaba que eran más de mil. El Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de A Coruña cree que es difícil calcular una cifra exacta.

Para Marea, es momento de actuar. “El Gobierno local mantiene, por ahora, tres millones de euros paralizados. Los bajos vacíos no son un problema solo del pequeño comercio sino de la ciudad”, apuntan fuentes del grupo de la oposición, que aseguran que estos espacios sin actividad generan “inseguridad, pérdida de servicios de proximidad en los barrios y de la cohesión social y deterioro”.

Compartir el artículo

stats