La anterior concesionaria de las bibliotecas municipales de A Coruña aún debe el pago de las vacaciones a parte de la plantilla

La deuda afecta a una veintena de trabajadoras y la empresa les informó hace un mes de que pagaría

RAC

La empresa LTM Servicios Bibliotecarios, concesionaria hasta comienzos de diciembre pasado de parte de las bibliotecas municipales de A Coruña, adeuda todavía el abono del periodo de vacaciones a algunas de las trabajadoras, según ha comunicado el comité de empresa al personal en los últimos días. Las afectadas hasta ahora —la mayor parte de la plantilla está formada por mujeres—rozan la veintena y el impago por este concepto también se le ha comunicado al Ayuntamiento y a la actual concesionaria, la empresa Ilunion, que agrupa las iniciativas empresariales de la ONCE.

Las cantidades adeudadas son distintas, ya que el personal tuvo vacaciones en diferentes épocas del año; son deudas que corresponden generalmente a días no trabajados, aunque en algún caso la cifra pendiente de cobro roza los 1.000 euros, apuntan fuentes consultadas por este diario. Las mismas fuentes señalan que LTM ha informado de que va a pagar lo que debe, pero las trabajadoras llevan más de un mes esperando a que esto se cumpla. La plantilla confía, por otra parte, en que Ilunion mantenga con normalidad el cobro de las nóminas, sin detraer cantidades adeudadas en concepto de vacaciones.

“Mermada solvencia”

La nueva concesionaria se encarga desde hace poco más de un mes de la gestión de las bibliotecas del Centro Ágora, Fórum Metropolitano, Os Rosales, Sagrada Familia, la Infantil y Juvenil de Durán Loriga y el punto de servicio bibliotecario del centro cívico de Mesoiro. El traspaso de la concesión se produjo debido a los problemas económicos de LTM, que dificultaron que los trabajadores cobrasen sus salarios en tiempo y forma; por esta razón llevaron sus protestas a la calle desde mediados del año pasado y llegaron a realizar una huelga.

El Concello, a petición de las afectadas, intervino en el conflicto y a finales de noviembre el representante legal de LTM y el de Ilunion presentaron una petición conjunta de ceder el contrato, señalando que la “crisis económica” actual había provocado que LTM tuviera “seriamente mermada su solvencia económica para el desarrollo de su actividad”. La anterior concesionaria había asumido el contrato un año antes por 2,7 millones de euros anuales.