Urbanismo en A Coruña: Mucha acera por un lado, casi nada por el otro

Una obra reduce a 40 centímetros el espacio de acceso a una casa en San Vicente de Elviña, mientras que enfrente se ha ampliado a 1,60 metros

Couto, ante su acera reducida y su casa, detrás, y la acera ampliada a la izquierda de la imagen.   | // PARDELLAS

Couto, ante su acera reducida y su casa, detrás, y la acera ampliada a la izquierda de la imagen. | // PARDELLAS / R. D. R.

La calle Antonio Insua Rivas, en San Vicente de Elviña, tiene un punto conflictivo a la altura del número 23, el tramo en el que más se estrecha la superficie para el paso de vehículos, entre ellos la línea 24 del bus urbano. Un vecino, el propietario de esa casa unifamiliar, es el más afectado, ya que se ha quedado sin apenas acera. Los escasos 40 centímetros de los que dispone para salir y entrar en su domicilio junto a una valla metálica protectora instalada hace años en ese estrechamiento de calzada contrastan con el aumento de centímetros que ahora tiene la acera de enfrente, de 1,60 metros, ampliada como parte de unas obras de reurbanización que se ejecutan en la zona desde noviembre de 2021. El vecino ha solicitado al Ayuntamiento que modifique el reparto de espacios para poder acceder a su vivienda con más comodidad, sin hasta ahora obtener respuesta.

Un tramo de la calle en cuyo centro queda la casa del número 23 está cortado desde hace unas semanas. Los obreros trabajan en el alcantarillado, en la pavimentación, en la instalación de tuberías de gas natural y en soterrar el cableado; incluso se ha derribado un viejo alpendre. Dicen los vecinos que estos trabajos unidos a otros que comenzaron en la zona hace más de un año tenían que haber concluido hace meses, y desconocen por qué se han prolongado. José Manuel Fernández Couto, que nació en San Vicente de Elviña hace 61 años, es el residente afectado por la eliminación de acera frente a su vivienda. “Es una vergüenza que no pueda entrar ni salir de casa holgadamente cuando enfrente hay un metro y sesenta centímetros de acera que han agrandado. Nadie nos dijo cómo nos iban a afectar estas obras”, se queja Couto.

Aunque el tráfico no es continuo por este punto de la calle Antonio Insua Rivas, los vecinos alertan de que a veces los coches circulan “a más velocidad de la que deben”. El bus tiene que pasar con prudencia por este enclave, ahora más con el aumento de centímetros en una de las aceras. De hecho, la valla metálica que Couto tiene ante su puerta se instaló en el mandato de Francisco Vázquez después de que al menos dos vehículos chocasen contra una esquina de su vivienda por circular deprisa y perder el control del coche.

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