Los impulsores del megaparque eólico de Nordés prevén su puesta en marcha en 2030

Los promotores del parque eólico marino Nordés, un proyecto previsto a unos 50 kilómetros de la costa de la ciudad de A Coruña y que promueve el consorcio formado por Blue Float y Sener, expusieron ayer martes en una sesión informativa las claves de su propuesta, que será presentada al concurso público que será convocado para la adjudicación de los espacios en el mar para la generación de electricidad. La previsión que manejan, si el Gobierno central culmina los trámites administrativos que tiene pendientes durante los próximos doce meses, es que esta iniciativa esté en funcionamiento en el año 2030, es decir, tres años para obtener los permisos y otros tres para las obras.

El director general de Blue Float, Javier Monfort, indicó que en siete años podría estar en funcionamiento este parque eólico marino en el océano Atlántico si el Ejecutivo central aprueba de forma definitiva los Planes de ordenación del espacio marítimo (POEM) próximamente y la subasta de la potencia eléctrica, en la que se seleccionarán las propuesta que se llevarán a cabo, se realiza entre “finales” de este año y “principios” de 2024. “Todo depende de que se convoque la subasta. Si se demora más, irían para adelante los plazos”, aseguró. También destacó que con Nordés se ha optado por “adelantar trabajos” con la exposición al público del proyecto para que los posibles afectados y administraciones públicas puedan presentar las reclamaciones que consideran oportunas, aunque advirtió que se trata de un trámite “a riesgo” porque no está garantizado que el parque eólico salga adelante, ya que en el concurso público puede salir escogida otra iniciativa.

El Ministerio para la Transición Ecológica recibió y expuso al público a principios de 2022 la documentación presentada por los impulsores de esta iniciativa, un paso que definen como una “declaración de intenciones” para “dialogar con el territorio”. De este modo se conoció que la actuación esta dividida en dos etapas diferentes. La primera incluye la instalación de 35 aerogeneradores, con una producción estimada de 2.100 gigavatios-hora al año. La distancia mínima a la costa es de 31 kilómetros en la zona de Ferrol, mientras que desde la ciudad de A Coruña la cifra llega a unos 50 kilómetros. Su superficie asciende a 115 kilómetros cuadrados. En una segunda fase se prevé la colocación de otros 45 torres, que extenderían la producción anual del parque a cerca de 4.800 gigavatios-hora al año. Esto hace un total de 80 aerogeneradores. La superficie con el parque eólico ya desarrollado por completo llega a 268 kilómetros cuadrados.

La electricidad generada está previsto que se canalice a través de una línea que llegue hasta la subestación del polígono de Sabón, en Arteixo. La propuesta inicial suponía que su entrada a tierra fuese por la playa próximo al parque empresarial, pero el Concello arteixano mostró su oposición. La encargada del desarrollo de negocio de BlueFloat, Helena Brage, aludió a esta situación y aseguró que se puede “acceder por punta Langosteira” y no por el arenal, ocupando el menor espacio portuario posible.

Los promotores del proyecto también hicieron hincapié en la necesidad de que la regulación que apruebe el Gobierno central incluya como requisito para todas las propuestas de eólica marina, un proceso de diálogo y adaptación al territorio, para garantizar las infraestructuras estratégicas cuentan con elevados niveles de aprobación ciudadana.

Suscríbete para seguir leyendo