La demanda de nuevos alumnos supera la oferta en solo 5 de los 37 centros públicos y concertados

La caída de la natalidad en la ciudad, que en los últimos diez años se ha reducido un 30%, ha tenido entre sus consecuencias un cambio de tendencia en la primera escolarización de los niños al dejar la guardería. En 2019, la demanda de plazas para el 4º curso de Educación Infantil (menores de 3 años) superaba la oferta en la mitad de los centros públicos y concertados de A Coruña, un total de 37; para el próximo curso 2023-2024 las solicitudes solo son mayores que el número de plazas ofertadas en cinco colegios, donde habrá lista de espera: los públicos Labaca, San Francisco Javier, Rosalía de Castro y Zalaeta y el concertado de Santa María del Mar.

Los datos recopilados corresponden a casi todos los colegios no privados de la ciudad: diez concertados, 27 públicos (cinco no los han facilitado a este periódico al cierre del plazo de solicitud de vacantes). El panorama es parecido al del año pasado, aunque esta vez es mayor el número de solicitantes en conjunto, puesto que, a falta de esos datos pendientes, superan los 1.100 frente a los apenas 1.000 de hace doce meses. En total, los centros de la ciudad ofrecen 1.710 plazas; la mayoría tienen dos líneas (50 alumnos repartidos en dos aulas), hay doce con una línea de 25 menores, cinco con tres líneas, dos con cuatro (100 alumnos) y uno con solamente 10 niños y niñas.

De los datos disponibles se extrae que para el próximo curso quince centros educativos han aumentado el número de solicitudes con respecto a la convocatoria del año anterior, mientras que otros quince lo han reducido. Entre los primeros crece considerablemente la demanda en el colegio Cidade Vella (de ocho el año pasado a 22 este), el CEIP Novo Mesoiro (de 39 a 49) y Santa María del Mar (de 110 a 127), que repite año con lista de espera, al igual que San Francisco Javier. En el otro extremo está la caída notable de solicitudes en el Concepción Arenal (de 45 a 30), el María Barbeito (de 65 a 51), Montegrande (de 22 a 9) y el Santo Domingo (de 33 a 25).

Estos son los colegios de A Coruña con más plazas que niños

Estos dos últimos colegios concertados figuran entre los siete en los que en la actual convocatoria la demanda es la mitad que la oferta o menos; los otros son Curros Enríquez, Salgado Torres, Raquel Camacho, Víctor López Seoane y Alborada, centro afectado por la pérdida de alumnos desde hace dos años por la apertura del colegio de Novo Mesoiro; para el próximo curso solo han presentado solicitud 16 familias para un total de 50 plazas disponibles.

Las pocas listas de espera no cogen por sorpresa a la comunidad educativa, pese a que hayan subido las solicitudes totales en un año. En 2022 se podía explicar todavía por el temor de las familias al COVID. La concentración de varios colegios en determinadas zonas de la ciudad es otra de las razones que hacen que las familias tengan donde elegir para educar a sus hijos, lo que deja a unos centros sin el volumen de alumnos que tenían años anteriores y hace que otros tengan ahora más que antes, según apunta Antonio Leonardo Pastor, presidente de la asociación de directores de centros públicos de A Coruña y director del Curros Enríquez, quien lamenta que la escasez de niños y niñas en las aulas incide en su capacidad de socialización.

Pero es la crisis demográfica la que mejor explica que no se cubran todas la plazas en la primera escolarización. Según el Instituto Galego de Estadística (IGE), en 2020, el año en el que nacieron los niños a los que les tocaría entrar en cuarto de Infantil el próximo curso, hubo 1.501 nacimientos en la ciudad, frente a los 1.577 nacidos un año antes (un 4,8% más). Una década antes, en 2010, habían sido 2.134 los bebés alumbrados en A Coruña: la caída es de casi el 30% en apenas diez años.

Suprimir o fusionar aulas

Con los datos para el próximo curso, cinco colegios públicos y concertados de la ciudad tendrán que baremar para ajustar sus listas de espera. Los que tienen una demanda mucho más reducida pueden verse en el caso de tener que reducir una de las aulas con las que concurren a la convocatoria. Por ejemplo, si un centro con 75 plazas ofertadas (tres aulas) solo tiene para el próximo septiembre 50 peticiones o menos, suprimiría un aula y se quedaría con las otras dos para los menores matriculados o las fusionaría, explica una fuente educativa consultada por este periódico. De cara al curso siguiente, la Xunta, con competencias en Educación, podría dejarle volver a ofertar 50 plazas, ya que la demanda de las familias podría cambiar de un año para otro.

Tras el envío de la documentación para las solicitudes de plaza por parte de las familias, estas conocerán los listados provisionales de admitidos y excluidos este sábado 25 de abril; las definitivas se sabrán el 15 de mayo y los plazos de formalización de matrícula van del 20 al 30 de junio para alumnos de Infantil y Primaria (del 23 de junio al 7 de julio para Secundaria y Bachillerato).

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