Las viviendas turísticas son casi el 5% de los pisos en la zona de la calle Real y San Andrés

Las viviendas turísticas suponen el 0,5% de las existentes en la ciudad de A Coruña, de acuerdo con los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que calcula que sumaban 683 el pasado mes de febrero. Pero, mientras que esta modalidad de alojamiento apenas tiene presencia en muchas partes de la ciudad, en el centro se produce una especial concentración. En la sección que incluye la calle Real, la avenida de la Marina desde la calle Agar al Cantón Grande, Olmos, Galera y el inicio de San Andrés, el porcentaje sobre el total de viviendas es el más alto de la ciudad: el 4,7%.

El INE realiza la estadística teniendo como referencia los distritos municipales y las secciones del censo. Atendiendo a los primeros, los más grandes y que dividen la ciudad en diez zonas, las viviendas turísticas solo sobrepasan el 1% en el primero, que incluye la Ciudad Vieja y Pescadería. En esta sección son las viviendas turísticas son 2,32% del total, y le sigue el segundo distrito, Monte Alto, con un 0,66%, mientras que en la periferia no llegan al 0,1%.

Ya dentro de las secciones, tras la de la calle Real la zona con más porcentaje de vivienda turística es la de la parte de la Ciudad Vieja que queda al Este de la calle Sinagoga, y que engloba la zona de la avenida del Metrosidero y la de los jardines de San Carlos. En esta zona, en la que se encuentran calles como Cortaduría, Santo Domingo, San Francisco y Tinajas, el porcentaje de vivienda turística es del 3,25%. Es casi igual de elevada, del 3,19%, en la sección centrada en la plaza de María Pita que incluye las calles Tabernas y Parrote, por el Este, y Riego de Agua, Luchana y parte de la Franja por el Oeste.

En la zona que empieza en la plaza de Pontevedra y va hasta la Rúa Alta por el Orzán y hasta la iglesia castrense a través de San Andrés, las viviendas turísticas suponen el 2,51% del total, mientras que en la sección en torno al mercado de San Agustín (con parte de Varela Silvari, Juan XXIII, la plaza del Humor, Florida y parte de la Franja) se llega al 2,25%.

Vecinos, agentes de la propiedad y hoteles de A Coruña reclaman regular los pisos turísticos en la mesa municipal

El Oeste de la Ciudad Vieja —formado por las calles Nuestra Señora del Rosario, Amargura, Damas, Puerta de Aires y Zapatería— es la última de las secciones que el INE marca con el color rojo correspondiente a las zonas más tensionadas: las viviendas turísticas suman algo menos del 2% de los pisos.

Otra docena de secciones de Pescadería y Monte Alto se acercan al 1% o lo superan, de acuerdo con los registros del INE: en la zona de la calle del Socorro se alcanza por ejemplo el 1,44%.

En el caso de Monte Alto, las mayores concentraciones se dan en las zonas más cercanas al mar, mientras que hay menos intensidad de pisos turísticos en zonas centrales como la de la plaza Indalecio Prieto o la calle Marola, en las que las viviendas turísticas son menos de una de cada 200.

Fuera de la península y el istmo coruñeses solo se supera el 1% en casos puntuales: el entorno del estadio de Riazor, secciones de la avenida Calvo Sotelo y el parque de Santa Margarita, así como la zona de la avenida del Marqués de Figueroa, frente a la estación del ferrocarril.

El porcentaje de viviendas turísticas de A Coruña supera al de Lugo, Ourense y Ferrol, aunque se sitúa en un puesto medio entre las grandes ciudades gallegas, ya que Vigo está en el 0,66%, Pontevedra en el 0,76% y Santiago en el 0,85%. Por el momento aún se encuentra lejos de municipios costeros especializados en turismo, puesto que el porcentaje de estas viviendas llega ya al 6,34% en Sanxenxo, en las Rías Baixas, o al 5,92% en O Vicedo, en A Mariña lucense.

El registro de la Xunta contiene casi 800 pisos

Las cifras del Instituto Nacional de Estadística no coinciden con las del Rexistro de Empresas e Actividades Turísticas de Galicia, que a principios de abril contabilizaba en A Coruña 791 viviendas de uso turístico. El fuerte crecimiento de este tipo de alojamientos en la ciudad en los últimos años llevó al Gobierno local a convocar el mes pasado una mesa sectorial que determine la regulación municipal que se aplicará a estas viviendas a partir de julio. Aunque los socialistas descartaron inicialmente controlar su crecimiento, finalmente optaron por hacerlo ante la presión ejercida por Marea Atlántica, con la que se habían comprometido a hacerlo en 2021 en el marco de un pacto sobre vivienda.

Representantes de hoteles, asociaciones de vecinos y agentes de la propiedad inmobiliaria expusieron en la primera sesión realizada por la mesa el mes pasado la necesidad de una regulación para proteger el derecho al descanso de los vecinos, impedir que la proliferación de pisos afecte al precio de los alquileres y, en el caso de la Asociación Empresarial de Hospedaje de A Coruña (Hospeco), exigir que los pisos se rijan por las mismas normas que la hostelería en cuanto a impuestos y requisitos.

La mesa también cuenta con la representación de la agrupación de propietarios de pisos turísticos (Aviturga), que reclama que se realice un diagnóstico de la situación antes de adoptar medidas, por lo que exige conocer el número real de viviendas turísticas, su ubicación y las zonas de la ciudad con el alquiler más alto y las razones de ese fenómeno.

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