El proyecto del ambulatorio de Santa Lucía conserva la estructura y el concepto del edificio original de 1980

El diseño ganador del concurso de ideas distribuye los espacios sanitarios en tres plantas escalonadas, sitúa el mercado en el sótano junto al ‘parking’ y reserva cuatro alturas para el centro cívico en el inmueble anexo

Recreación virtual del exterior del futuro centro de salud de Santa Lucía.   | // LA OPINIÓN

Recreación virtual del exterior del futuro centro de salud de Santa Lucía. | // LA OPINIÓN / R. D. R.

La reforma del edificio del antiguo mercado de Santa Lucía y su transformación en centro de salud y centro cívico de A Falperra mantendrá la estructura original del inmueble diseñado en 1980 respetando la concepción original de su autor, Manuel Gallego Jorreto. El proyecto ganador del concurso de ideas convocado por el Concello en los últimos meses del mandato, difundido ayer, presenta un diseño con distribución horizontal que destina tres plantas escalonadas a servicios sanitarios; en el sótano, el espacio queda reservado para el aparcamiento y el mercado; y por encima, en el edificio anexo vertical tres alturas serán para las dependencias del centro cívico.

El proyecto ganador del concurso superó a otras 13 propuestas. Está firmado por el estudio madrileño de arquitectura Burgos & Garrido, que se embolsa 20.000 euros. Es el responsable del diseño que también ganó el concurso del nuevo hospital La Paz de Madrid. Por delante tiene un plazo de cuatro meses para presentar los proyectos básicos y de ejecución. La obra tiene un coste que superará los ocho millones de euros, de los que tres ya ha obtenido el Ayuntamiento a través de fondos europeos del plan Pirep.

La distribución de las alturas fue una de las razones que demoró la ejecución de la reforma concebida a finales del mandato de PP y atascada en el de Marea por las diferencias de criterio entre Concello y Xunta. La administración local, que encargó la transformación al propio Jorreto, defendía la distribución en vertical de los servicios de atención sanitaria, frente a la concepción de Sanidade que promovía un diseño lo más horizontal posible, con pocas alturas y áreas amplias. El arquitecto concebía difícil la convivencia de usos en pocas plantas, por eso apostaba por varias alturas aunque admitía que la disposición en horizontal para un ambulatorio era la más adecuada.

Después de más de dos mandatos, y tras acordar Concello y Xunta hace un año y medio que para afrontar la reforma haría falta convocar antes un concurso, el futuro centro de salud distribuirá en las tres plantas escalonadas un área médica, otra pediátrica y otra de la mujer, sala de espera y vestíbulo por el acceso por la calle Doctor Fleming. Por Inés de Castro se entrará al centro cívico, con cuatro plantas para distribuir salón de actos, despachos, aulas y un aula polivalente. El mercado y el parking se plantean en el sótano con dos posibilidades: 428 metros cuadrados para la plaza de abastos y once plazas de estacionamiento o 353 metros comerciales y 16 aparcamientos.

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