Carlos Varela | Cantautor cubano, el día 8 en la sala Garufa

“Soy nieto de gallegos, a través del oficio de la música uno se encuentra con sus raíces”

“Muchos cubanos de fuera de Cuba vienen a mis conciertos y ríen, lloran, es una catarsis”

El cantautor y músico cubano Carlos Varela.   | // LOC

El cantautor y músico cubano Carlos Varela. | // LOC / OLIVIA PRENDES D'ESPAUX

El cantautor cubano Carlos Varela, nieto de coruñeses, celebra sus 40 años de trayectoria en la sala Garufa mañana día 8 (21.00 horas).

Es un concierto especial para usted, nieto de coruñeses. ¿Cómo vive la vuelta a casa?

Es una ilusión tremenda sabiendo que es la tierra de mis abuelos, y la tierra en donde se criaron mis padres. La he visitado algunas veces, la última con Sabina, y es n sitio que me fascina. Por primera vez voy a ir con mi banda celebrando los primeros 40 años de carretera en este oficio. Va a ser una oportunidad muy bonita para recopilar una serie de canciones de toda la vida, reencontrarme con muchos amigos, incluso primos que tengo allá, y será una oportunidad para regresarme más a menudo y, de alguna manera, reencontrarme con la historia de mis abuelos, de mis padres y de mi pasado.

Los pueblos cubano y gallego son prácticamente parientes. ¿Hay algo de gallego en usted, con esta ascendencia?

En el único sitio donde he coincidido con tres personas con apellido Varela ha sido ahí. Recuerdo a principios de los 90, yo no sabía que Varela era un apellido completamente gallego. Es muy interesante al final con los años vas descubriendo que tienes mucho que ver con el carácter de sus padres, y también con el de mis abuelos, que no los conocí, pero dicen que si. Es interesante que a través del oficio de la música uno pueda reencontrarse con su pasado familiar, con su historia y con sus raíces. Hay toda una historia detrás, de cómo mis padres llegaron a la Habana en barco, como hicieron hace años muchos otros gallegos y españoles. Va a ser muy bonito cantar y estar unos días por la ciudad.

En Galicia hay querencia por la música cubana, pero muchos de sus paisanos que viven aquí aprovechan sus conciertos también para conectar con su tierra.

Hay cubanos en cualquier parte de mundo. El concierto del otro día en Madrid fue mágico, muy especial, había españoles pero fundamentalmente cubanos, y es muy bonito que los cubanos vengan a los conciertos a encontrarse con su historia, con su barrio, con las canciones con las que crecieron. Es una bendición que en este mundo todavía exista un oficio como la música, que te traiga todos estos recuerdos, toas estas vivencias. Por eso en estos conciertos la gente llora, ríe, baila, es una catarsis muy bonita. Es una bendición que lo escojan a uno para crear ese tipo de puentes con el pasado, con el barrio, con la historia, con su país. Eso es un valor añadido a las canciones. En cualquier parte del mundo, el reencuentro con generaciones y generaciones de cubanos que están viviendo fuera de Cuba siempre le da un toque especial a los conciertos.

Dice que esta gira es para celebrar sus primeros 40 años de trayectoria. Hay gente que después de todo ese tiempo decide retirarse, pero a usted aun le queda carretera.

Claro, qué me voy a retirar yo, si tengo un montón de canciones nuevas y discos por grabar. Queremos grabar el nuevo disco este año aquí, en distintas ciudades, y al mismo tiempo cantar en la medida que le influye a uno las experiencias que va conociendo, pero sí, tengo mucho que cantar todavía. Escribir canciones es una pasión que va más allá del mercado. Uno sigue inevitablemente, porque escribir canciones para uno es una terapia, es la manera que tiene uno de confesarse a si mismo sobre todo lo que ha vivido. Hay canciones que son más afortunadas que otras. Gracias a dios, tengo unas cuantas que han tenido alguna suerte de sobrevivir en este mercado caótico de la música. Mientras eso existe habrá fuerzas para seguir cantando al público. Todavía tengo esa voluntad y energía de seguir escribiendo.

¿A qué suenan sus nuevos temas?

Hay de todo. Yo vengo de una tradición de la cancionística cubana, que en los 80 se llamó La Nueva Trova, que luego con los años distintas generaciones fueron mostrando su estilo e influencia. La mía aun más cerca del rock and roll, pop, blues, jazz, canción cubana, ahí está mezclado todo. Llo más importante es de qué hablo: de la historia que le ha tocado vivir a uno, los sentimientos, las ilusiones, los sueños, también las desilusiones. Con muchas de ellas podías contar una buena parte de lo que le ha tocado vivir a mi generación en los últimos 40 años.

¿Cuál es la historia de su generación?

Muchos amigos perdidos en el mar, familias separadas, gente con muchas ilusiones que luego sintió una frustración tremenda, gente con sueños que se convirtieron en sueños rotos. Al mismo tiempo, con las ganas de echar para adelante en cualquier sitio donde uno se encuentre, y añorando la tierra que nos vio nacer. Hablo de todo eso y más en sus canciones.

¿Tiene herederos la generación de La Nueva Trova Cubana?

Cuba es un país donde levantas una piedra y salen músicos, de distinto género y estilo. Siempre hay jóvenes tratando de seguir el camino. No es fácil, la tendencia en los últimos años ha sido hacia una música más ligera, menos comprometida, menos social, que está buscando vías para tener más facilidad en el mercado de la música mundial, que no es nada fácil desde Cuba. Es un país pequeño del que salen muchos músicos y poetas, y estoy seguro de que hay y habrá jóvenes que querrán seguir le camino de pasarle la ballesta a Guillermo Tell. No solo en la música, también en la literatura, la música, siempre habrá gente con un sentido crítico de la realidad y que van a querer luchar por transformarla.