Hasta 2.600 euros la semana en agosto: así repunta el alquiler de pisos vacacionales en A Coruña

El auge del alquiler vacacional en los últimos años como alternativa a los hoteles tradicionales dispara los precios cada verano. En la semana grande del mes de agosto en A Coruña, del lunes 7 al domingo 13, el precio mínimo que se pide por seis noches por un piso para tres personas (una pareja y un hijo) ronda los 500 euros, en alojamientos de Os Mallos o Santa Margarita; los precios máximos llegan a los 2.600 euros por el mismo periodo, una semana, en pisos de Juan Flórez y otras zonas del Ensanche o la Ciudad Vieja. En los anuncios que recoge para las mismas fechas la plataforma digital Airbnb, especializada en ofrecer alojamientos turísticos a particulares, son mayoría los que ofertan estancias al precio de entre mil y dos mil euros.

Estas cantidades se han elevado en un año porque la demanda ha crecido, especialmente en las últimas semanas de julio y la primera mitad de agosto frente a un resto del año con menos solicitantes y precios más bajos, apuntan agentes inmobiliarios del sector consultados por este periódico. Un piso a un paso de la playa del Matadero, por ejemplo, baja de 2.215 en agosto a 899 euros (un 146% menos) en la segunda semana completa de junio, y la diferencia entre alquilar otro piso en la calle Real ahora y hacerlo dentro de dos meses es de 300 euros (1.330 hoy y 1.660 después). Las mismas fuentes advierten de que para las fechas de mayor presencia de turistas se piden cantidades “abusivas” por algunas viviendas, por las que, pese a ello, hay clientes dispuestos a pagar.

La subida de precios en la ciudad responde a la tendencia alcista general en toda Galicia y, por extensión, en España. De acuerdo con un informe de la semana pasada difundido por Tecnitasa, sociedad de tasación independiente de entidades financieras, el alquiler de pisos en municipios costeros de Galicia ha crecido un 6% en un año, hasta 930 euros de media a la semana en agosto. El mismo documento señala la zona de Riazor con alquileres a 1.200 euros semanales, Santa Cruz y Bastiagueiro a 950, Miño a 750 y Cabanas y Malpica a 700 euros. Los precios varían según la temporada del verano o del año y no hay precios estimativos porque dependen de otros factores, entre ellos las pretensiones de los propietarios de las viviendas que las ofrecen para arrendar.

Hay agentes inmobiliarios de esta rama del sector que trabajan con lo que llaman “precios dinámicos”, establecidos con algoritmos de un software que modifica el precio de los pisos en determinados ámbitos geográficos en función de la disponibilidad de los mismos, la ubicación, su capacidad y la competencia con otros ofertantes, explica Sara Núñez. Esta agente de Vibescoruna.com mueve unos 75 pisos en la actualidad, la gran mayoría en la ciudad y en distintas zonas: en junio la noche cuesta unos 55 euros (330 la semana), pero en agosto costará 200 (hasta 1.200 seis noches) si es próximo a la playa o 150 (900 euros la semana) si está en el interior.

¿Cuánto cuesta alquilar un piso en la costa gallega este verano? Un 6% más: hasta 930 euros la semana

Inmobiliarias convencionales no suelen trabajar tanto con alojamientos vacacionales, su oferta es más limitada, centrada sobre todo en la búsqueda de viviendas en el Orzán, Zalaeta, San Andrés, la Marina y la Ciudad Vieja. Ricardo Rochela, de la inmobiliaria Luz, apunta que sus clientes ofrecen los pisos o casas por quincenas o meses enteros, al precio de entre 1.500 y 2.000 euros el mes si es una vivienda de dos dormitorios en la ciudad y de 3.000 a 4.000 euros en lugares como Mera.

Patricia López, de la agencia de viajes Galicia Holiday, especializada en alojamientos vacacionales, gran parte con piscina y muchos de lujo, confirma que no hay precios medios de alquiler en verano y advierte la tendencia a ocupar casas en concellos próximos a A Coruña por la preferencia a tener la ciudad a mano. “Hacemos una propuesta de precio, pero la gente hace lo que quiere. Son casas de propietarios privados que no conocen el mercado turístico y si le tienen cariño a la casa le ponen un precio más caro. Por eso es difícil fijar un rango de precios”, cuenta. Indica que la zona A Coruña-Oleiros está “muy bien valorada” en el mercado, que Sada también tiene demanda y que en Miño hay propiedades que ofertan el alquiler a 4.000 euros la semana.

Otra búsqueda en Airbnb para la segunda semana de agosto en municipios próximos a A Coruña muestra disponibilidad de apartamentos y lofts para una pareja con un niño en Miño y Sada a precios de 625 y 667 euros respectivamente como ofertas más accesibles. Un ático en Oleiros llega a los 822 euros, un apartamento en Bastiagueiro, a 864, y otro en Sada roza los 1.100. El gasto es mayor para ocupar un chalé en este mismo ayuntamiento costero, 1.608 euros.

Productoras, deportistas y familias

No solo familias buscan pisos turísticos en una ciudad como A Coruña, generalmente “con bastantes meses de antelación”, tanto en línea de costa como en calles céntricas o incluso más alejadas del centro, sino también empresas que desplazan trabajadores temporalmente a la ciudad, productoras que graban películas o piezas audiovisuales durante días o deportistas que participan en competiciones de más de dos o tres jornadas. Los agentes inmobiliarios de este sector sirven de enlace entre los clientes y los propietarios de las viviendas, que en los precios que solicitan añaden el gasto en limpieza y lavandería y en ocasiones impuestos o comisiones por el servicio ofrecido por la plataforma digital.

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