Entrevista | Manuel Freire Nuevo presidente de la Junta de Personal del Concello

“Más que pedir más funcionarios, urge no quedarnos paralizados de nuevo por falta de trabajadores”

“El principal reto, que es una necesidad apremiante, es actualizar la Relación de Puestos de Trabajo, y ya se está haciendo una auditoría”

Manuel Freire, presidente de la Junta del Personal municipal.   | // PARDELLAS

Manuel Freire, presidente de la Junta del Personal municipal. | // PARDELLAS / R. D. Rodríguez

El sindicato CSIF ha renovado la presidencia de la Junta de Personal del Concello de A Coruña, el órgano de representación de su personal funcionario. A Ana Pedreira le sucede Manuel Freire, policía municipal con 31 años de experiencia, desde mayo de 1992. “Aún me quedan tres o cuatro añitos”, apunta. En la junta, que presenta varios cargos nuevos, el CSIF gana dos miembros más tras la votación de los 23 delegados electos en las elecciones de los cuatro sindicatos con representación (CSIF, CCOO, UGT y CIG) en el Ayuntamiento, y afronta como gran reto la actualización de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), el catálogo que ordena las plazas de trabajadores municipales.

¿Qué tienen que solucionar prioritariamente con el Gobierno municipal?

De aquí a dentro de cuatro años hay que actualizar la Relación de Puestos de Trabajo, la RPT. Una empresa ya está haciendo la auditoría con la relación de los puestos, con encuestas a todos los funcionarios y jefes de servicio para conocer qué realizan en su trabajo, sus funciones, sus horarios, la penosidad… Presentará el estudio para que a continuación lo vea el Gobierno municipal y a partir de ahí diga si está de acuerdo, y comencemos el tira y afloja.

Se demanda desde hace mucho tiempo. ¿No ha habido voluntad en quien ha gobernado?

Es una necesidad tanto histórica como apremiante. Seguramente se haga una nueva RPT porque, aunque conviene seguir respetando conceptos de la actual, con el paso de los años ciertos puestos tienen una valoración distinta, otros han dejado de existir o ahora continúan pero con otras connotaciones. El tipo de trabajo va cambiando, por eso es necesario un estudio con nuevas tareas y capacidades de cada funcionario en su grupo o nivel. El Gobierno local tiene la voluntad de negociar esto, nadie tiene interés en que se repitan los encontronazos del pasado.

¿Por qué hubo esos roces?

Había un acuerdo marco firmado a última hora del mandato de Marea Atlántica y durante dos años pedimos que entrase en vigor. El Gobierno local era reticente a que entrase se aplicase; decía entonces Lage [José Manuel, portavoz municipal y concejal de Facenda e Personal] que ese acuerdo había sido un brindis al sol de Marea y por eso asumía que no era un acuerdo socialista, pese a haber votado a favor en el pleno. A partir de ahí tuvimos problemas por el concepto de la peligrosidad en los policías, el turno de la noche y el desarrollo de la carrera horizontal [aplicación de la progresión de grado o categoría sin necesidad de cambiar de puesto de trabajo], que al final firmamos de manera transitoria al acabar el pasado mandato.

Ese asunto se resolvió, ¿pero cuáles no?

La cobertura de las plazas que quedan pendientes a nivel general en todo el Concello, los concursos, las promociones internas. Es verdad que se han incrementado bastante en los últimos dos años, pero más que solicitar más funcionarios, urge que no nos quedemos paralizados de nuevo por falta de trabajadores. La provisión de puestos debería hacerse de manera regular para que cada año se tapen de forma inmediata los huecos que haya para no tener que hacer después grandes excesos sacando promociones y plazas enormes que tardan en cubrirse por el mecanismo del proceso.

Los policías locales se concentraron más de cien días por las mañanas en la plaza de María Pita en 2021 reclamando distintas mejoras en su servicio. ¿Se atendió esta demanda adecuadamente?

Se avanzó significativamente en dos acuerdos fundamentales: logramos cambiar un turno de la noche que tenía una gran penosidad por uno bastante mejor y también se consiguió el concepto de peligrosidad para bomberos y policías. Como policías, hemos mejorado porque nos llegaron los chalecos antibalas por los que esperábamos desde hacía cinco años. Se mejoró un poco la flota, pero debemos insistir en que los coches-patrulla no son como los turismos y en un año y medio están quemados, por los que sería ideal dividirlos para que solo salieran por turnos y no todo el día, pero eso supondría duplicar la flota.

¿La escasez de policías (en el 091 también) tiene difícil solución?

La plantilla debe crecer, no dejando nunca vacantes las plazas que se pueden cubrir según permite la ley, que hoy es hasta un 125%. La falta de agentes es un problema casi estructural al que no se le metió mano con los años, no se cubrieron las plazas que se podían cubrir. Se nos sigue marchando mucha gente y aún vamos a tardar años en poder tener el número real de policías que necesitaríamos.

El retraso en la concesión de licencias urbanísticas es una queja frecuente y se ha achacado también a la falta de personal suficiente en Urbanismo. ¿Se arregla con una nueva RPT o con más concursos?

Siempre hay que intentar un procedimiento que sea más dinámico porque la falta de personal es uno de los problemas más graves, más ahora en periodo vacacional, con un 25% de empleados en todos los departamentos del Concello. La mitad de año estamos en situación precaria. Claro que hay que meter más plazas, pero en todas las áreas.

Ya que antes lo mencionó. ¿Cómo es negociar con Lage?

Es un negociador muy duro, y yo le he dado mucha caña, pero hay que ser justo: cuando dio su palabra de que ciertos aspectos se iban a negociar para mejorar, cumplió.

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