Pisos en A Coruña con inquilino incluido: un modelo de venta que “cada vez irá a más”

La difusión del anuncio de la venta de un piso en A Coruña “con inquilina de más de 90 años” incluida ha hecho saltar las alarmas para muchos de los usuarios que accedieron al anuncio. Desde que se publicó en un portal inmobiliario, las responsables de la venta no han parado de recibir llamadas de personas interesadas, pero también de otras cuyo único fin es criticar y poner en duda el modelo de venta. Y es que, según explican las responsables de la inmobiliaria encargada de este piso, “hay mucha falta de información” sobre este modelo de venta, que se practica desde hace tiempo y que “irá a más en los próximos años”.

El anuncio es más que suculento: 85.000 euros por un piso de tres habitaciones y 79 metros cuadrados. Un inmueble que, en unas condiciones normales, estaría valorado en unos 175.000 euros, según indican desde la inmobiliaria Ninbú, encargada de la venta de este piso. La particularidad, en este caso, es que en la actualidad en el inmueble reside una mujer con un contrato de renta antigua.

“El modelo de venta está siendo mal entendido”, asegura Blanca Iglesias, una de las responsables de la inmobiliaria encargada. Desde que fue publicado el anuncio, han recibido un aluvión de llamadas y correos pidiendo información sobre la venta que parten de la desinformación. “Hay quien nos pregunta si el anuncio es falso, si tendrían que entra a vivir compartiendo piso con la inquilina o si podrían echarla”, comentan desde la inmobiliaria.

Lejos de esas suposiciones, la realidad de este tipo de venta busca un nuevo propietario para el inmueble que podría entrar a vivir una vez que la actual inquilina deje de habitar en él. El anuncio tiene un público objetivo: inversores con solvencia para pagar el piso sin hipotecarse ni prisa para entrar.

Este es un modelo de venta que ya lleva instaurado años en la ciudad. En este momento, según datos de la inmobiliaria, les consta que en A Coruña hay a la venta dos pisos más en esta misma situación, y llevan años llevando a cabo esta fórmula, que “va a ir a más” en los próximos años debido al cambio en el modelo de vida y a las necesidades económicas. “Hay que evolucionar e innovar”, sentencian.

“Esto ya se hace en muchas ciudades de España y Europa y no supone ningún problema. El modelo ya estuvo en auge aquí durante la crisis de 2008”, recuerda Ana Caridad, otra de las encargadas de la inmobiliaria. . Tanto ella como su compañera lamentan que en los últimos días han recibido numerosas llamadas que traspasaron “los límites de la moralidad y el respeto”.

“Hay quien nos está llamando para criticar nuestro trabajo con este modelo, acusarnos de especular con vidas humanas o directamente para hacernos preguntas escabrosas sobre la inquilina”, explican.

Y eso es, precisamente, de lo que huye la inmobiliaria: el morbo que suscita este modelo de venta. “En todas las ventas tiene que haber respeto, pero en esta todavía más. Lo trabajamos desde un punto de vista muy humano, no mercadeamos con las personas”, resalta Iglesias, que pide respeto también para las personas interesadas en el piso.

Desesperación por un piso en A Coruña, una plaza cara

Uno de los motivos que podría llevar a tanta gente a interesarse por un piso de estas condiciones, según la inmobiliaria encargada de su venta, es su bajo precio “Hay muy pocos pisos en la ciudad, está todo tan caro y la gente está desesperada”, comentan las encargadas de la venta. Según explica Blanca Iglesias, la ciudad de A Coruña se ha convertido últimamente en “una de las plazas en mayor auge de toda España”, gracias al buen clima de la ciudad, la cantidad de servicios que ofrece, o el nivel de empleo. “Cumple con todos los requisitos para que la gente quiera invertir aquí y eso e solo que está pasando en los últimos años, cada vez va a más y es difícil encontrar pisos”, asegura. Desde la inmobiliaria coruñesa destacan que las inversiones en pisos de la ciudad llegan no solo de Galicia, si no “de todas partes del mundo”. Sin ir más lejos, las últimas ventas las hicieron a personas residentes en países como Panamá o Estados Unidos. “Hemos vendido un piso a un policía de nueva York que se viene a vivir a la ciudad”, recuerda Iglesias, que explica que mucha gente viene de vacaciones a la ciudad y se queda “tan satisfecha que acaba invirtiendo”. Por otro lado, las inmobiliarias son conscientes de que el aumento del coste de los pisos puede llegar a suponer un problema para los propios coruñeses, pero es “la realidad del mercado”. “A día de hoy es difícil encontrar pisos en la ciudad, tanto para residentes como para gente que viene de fuera la cosa se ha complicado”, concluyen.

Suscríbete para seguir leyendo