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Dos libros, un váter, café y arroz: el encierro de Enrique Tenreiro

El artista que pintó la tumba de Franco se pone a vivir en el escaparate de la galería de arte Artbys: “No es un espectáculo, quiero que el Supremo me dé la sentencia”

El artista Enrique Tenreiro se encierra en una galería de arte de A Coruña para protestar por la tardanza judicial

Iago López

A Coruña

Punto e aparte y Derribando muros son los dos libros que acompañan al artista Enrique Tenreiro en su encierro. Ayer, a las 10.55 horas, se metió en el escaparate de la galería de arte Artbys de A Coruña, en la calle San Andrés, vestido de preso de Guantánamo con un mono naranja para denunciar la tardanza judicial, pues lleva más de un año y medio esperando por la resolución del Tribunal Supremo sobre su pintada, en octubre de 2018, en la tumba del dictador Francisco Franco en el Valle de los Caídos. “No es un espectáculo, quiero que el Supremo me dé la sentencia, sea absolutoria o no”, manifiesta.

En un espacio de tres metros por uno tiene una minicadena, una colchoneta y un váter químico. “Tengo arroz para pasar el día y como soy muy cafetero también me traje café, pero sin leche”, revela.

Cree que era momento de ponerse “serio” porque se cumplen 2002 días desde que hizo una paloma de la paz con pintura roja sobre la tumba de Franco. “Después de muchas penurias, salí absuelto, pero el asunto llegó al Supremo y después de casi dos años no dice ni mu”, lamenta el escultor, que teme que “intenten darle la vuelta a la sentencia” por lo que ha decidido encerrarse.

Tenreiro asegura que “tenemos una democracia que funciona bien, igual que la sanidad y la educación, pero la justicia no”. Por eso, con esta performance pretende alzar la voz contra la demora judicial. “Si me van a condenar, prefiero que me condenen ahora, que después pueden venir gobiernos más duros”, añade.

El escultor coruñés Enrique Tenreiro pinta una paloma de la paz en la tumba de Franco

Pedro Armestre

Para este encierro, que se puede seguir por streaming en la web de Artbys, se ha inspirado en el alemán Joseph Beuys, que en 1974 se metió en una galería de arte de Nueva York con un coyote. “Si lograra hacer su hazaña de estar tres días aquí sería genial”, señala.

Artbys seguirá con la iniciativa de dejar su escaparate a los artistas. “Hemos creado un foro y vamos a ceder este espacio todos los meses a un artista, al que daremos un bono de 300 euros. Durante un día podrá hacer lo que quiera sin censura”, cuenta Camilo Chas, propietario de la galería, que revela que estos días hará una cita a ciegas tipo First Days para darle más emoción a la acción de Tenreiro.

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