La linterna de la Colegiata será rehabilitada al sufrir colonias de hongos

La Colegiata de Santa María del Campo tiene «un buen estado de conservación», pero la linterna (la construcción de madera y vidrio de la cubierta que permite la entrada de luz) presenta un «deterioro grave», según un informe del Arzobispado de Santiago, que ha solicitado licencia para renovarla. Hay «abundantes filtraciones de agua» que ponen en riesgo las sujeciones, y el maderamen está colonizado «por hongos y podredumbre».

El Concello dio licencia a un proyecto de reforma presentado por la Iglesia, que contempla desmontar la linterna y llevar las piezas a taller, eliminando las que estén «totalmente dañadas» y recuperando las salvables. Eso sí, conservando las «características morfológicas» del elemento actual.

También hay «filtraciones de agua» a través de una ventana situada en la fachada oriental del templo de la calle Damas. El líquido ha «deteriorado los acabados interiores» y la sujeción de los barrotes de seguridad. Aquí el proyecto propone restaurar tanto las partes de madera como la fábrica de ladrillo, colocando un goterón o «canal de chapa de plomo» para evacuar el agua de la fachada.

El último punto que necesita trabajos es la unión entre la cubierta de la capilla situada al Noreste de la Colegiata y el muro de la nave principal, pues presenta «filtraciones de agua hacia el interior» que han generado la «proliferación de hongos y mohos». Aquí no se plantea cambiar ningún elemento existente, solo una limpieza, mejora de las uniones y una «impermeabilización de chapa de plomo» para evitar la entrada de lluvia. El presupuesto de ejecución de todas estas obras es de algo menos de 59.560 euros, y se prevé que la obra dure dos meses.