A Coruña tendrá tasa turística
Oscilará entre un euro por persona y día y los 2,50 euros | Aplicará a cruceristas, a visitantes que se alojen en hoteles, hostales, pensiones y viviendas turísticas

Turistas en A Coruña. | Víctor Echave
El Gobierno local ha iniciado la tramitación para crear una ordenanza municipal que regulará la implantación de una tasa turística en la ciudad. El concejal de Facenda, José Manuel Lage Tuñas, explicó este miércoles que este recargo oscilará entre un mínimo de un euro y un máximo de 2,5 euros por persona y día, según la categoría de los establecimientos en los que se hospeden los visitantes. Esto implica que esta tasa la tendrán que pagar los turistas que pernocten en establecimientos hoteleros y hosteleros pero también los cruceristas y los que elijan las viviendas turísticas para quedarse en la ciudad.
Lage Tuñas se mostró seguro de que la cantidad elegida para este tributo no disuadirá a los turistas de visitar la ciudad, pero ayudará a generar más fondos al Concello para hacer frente a los servicios que los visitantes usan en sus estancias.
Este documento se someterá a consulta pública desde este jueves hasta el 26 de febrero (ambos incluidos) a través de la página web del Concello para que los sectores afectados y vecinos puedan hacer sus propuestas al texto. En el documento, el Gobierno local explica que el 100% de la recaudación irá a parar a las arcas municipales y que, al menos el 80% de esta cantidad se destinará a tres fines: a mejorar el control sobre las viviendas que ceden habitaciones para usos turísticos, a mejorar la calidad de vida de las personas que residen en los barrios más afectados por la presión turística, para que recuperen «una actividad económica, social y cultural independiente del turismo»; y a la creación de nuevos contenidos que se puedan desarrollar en escenarios que permitan mejorar la desconcentración turística. Esta medida se acompasa con la redacción de la ordenanza para regular las viviendas de uso turístico para que puedan estar instaladas solo en bajos, primeros y edificios exclusivos, por lo que la previsión es que las 1.357 actuales se reduzcan a la mitad en 2025.
Estos fondos se destinarán también «a mejorar y diversificar la oferta turística, y a promover un modelo de turismo responsable y sostenible», unos objetivos que, según consta en la propuesta del Gobierno local, es necesario que se fortalezcan «con un incremento de recursos».
La recaudación estará contemplada ya en el proyecto de presupuestos que se presentará esta semana y que se vinculará a una cuestión de confianza al carecer de apoyos de la oposición para sacarlo adelante. Según explicó Lage Tuñas, la previsión es de 2,5 millones de euros para 2025, aunque no se podrá aplicar prácticamente en la primera mitad del año, ya que entre que se abre el periodo de consultas —tanto con los vecinos y afectados como con los grupos de la oposición— y se redacta el texto definitivo, el Gobierno local intentará llevarla a Pleno a finales de junio para su aprobación. Esta cifra supondría que tendrían que darse más de un millón de pernoctaciones en el último semestre del año en los alojamientos de los tramos más caros (en los hoteles de más categoría) para poder ingresar 2,5 millones de euros, algo que no sucede actualmente.
«Es el primer paso, buscamos un equilibrio entre el turismo y la corresponsabilidad», comentó Lage Tuñas, que adelantó que este documento no entra en conflicto con la Xunta y que A Coruña realizará la recaudación y la repercutirá íntegramente en las arcas municipales. Técnicamente, este tributo no es una tasa sino una recarga municipal en el impuesto gallego sobre las estancias turísticas para la ciudad y fue el Gobierno local de Santiago el que abrió el camino en Galicia para que se puedan aplicar estos pagos a los turistas recogidos en la ley autonómica.
El objetivo de esta ordenanza es «incrementar la capacidad financiera del Concello» para hacer frente a los «costes derivados del número de visitantes» que tiene a diario la ciudad y «corresponsabilizar» a los turistas de los servicios que usan durante su estancia, según defendió Lage Tuñas. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan que A Coruña entre enero y noviembre de 2024 recibió 445.437 turistas que registraron 891.577 pernoctaciones. Con estos datos, el Concello explica que cuenta con una «población flotante de 30.000 personas» y que esta situación le genera «un sobrecoste en el gasto de algunos servicios públicos», además de «una concentración muy marcada en algunos barrios» y que estas circunstancias se podrían paliar con lo recaudado por el recargo. Solo en cruceros, llegaron a la ciudad más de medio millón de personas —entre tripulantes y viajeros—, ya que durante 2024 hicieron escala en los muelles de A Coruña 168 buques.
Lage Tuñas puso como ejemplo a Barcelona, aunque el modelo presentado —a falta de que se redacte la ordenanza— es más similar al de Santiago, primero, porque es un recargo que se hace con arreglo a la ley autonómica, y segundo, porque propone los mismos límites, un euro en su tarifa más baja, y 2,5, en la más alta, frente a los cuatro euros de Barcelona o de Baleares. «Ahora hay un marco legal y nos ponemos con esto sin demora», comentó ayer Lage Tuñas, en referencia a la ley autonómica aprobada el año pasado.
«Es posible conciliar el interés de darles a los vecinos la mejor calidad de vida con seguir creciendo año a año en número de visitantes y que el turismo siga siendo una fuente de ingresos muy relevante en la ciudad», defendió el edil, que ahondó en la necesidad de que los visitantes «contribuyan» a crear «un turismo más sostenible y una ciudad con mejores servicios».
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