Gorka Rodríguez, un cocinero con ‘ADN de pulpeiro’ que actualiza una larga tradición familiar
El coruñés comanda La Pulpeira de Melide continuando la labor que llevaron a cabo sus bisabuelos, abuelos y padres. El chef se mantiene fiel a las recetas clásicas aplicando un toque de modernidad con lo que aprendió al formarse en alguno de los mejores restaurantes como Mugaritz o Noma

El chef Gorka Rodríguez posa con su producto estrella, el pulpo, en la cocina de La Pulpeira de Melide. | Casteleiro/Roller Agencia
Hace casi un siglo, un arriero de O Carballiño y una panadera de Melide, se conocieron, se enamoraron y fundaron en A Coruña una famosa pulpería. Con esos genes, no es de extrañar que su bisnieto sea hoy en día uno de los grandes referentes a la hora de preparar ese pulpo á feira que es emblema universal de la gastronomía gallega. Gorka Rodríguez comanda La Pulpeira de Melide en la Plaza de España, uno de los restaurantes más prestigiosos de la ciudad.
«Me crie con el oficio y siempre supe que era una posibilidad acabar dedicándome a esto», cuenta el chef. Gorka recuerda su infancia en Os Mallos, pasando tiempo en la calle y conviviendo con otros niños de otros negocios: «Era otro mundo, todos nos conocíamos y un estilo de vida totalmente distinto».
Aunque conocía la hostelería desde niño, el coruñés decidió formarse como cocinero estudiando en el Centro Superior de Hostelería de Galicia y el CIFP Paseo das Pontes. A pesar de ello, el chef no tenía demasiado claro su futuro, pero una decisión profesional lo cambió todo: «Empecé a querer dedicarme a esto cuando me fui a trabajar a Mugaritz [ganador de dos Estrellas Michelin y tres Soles de Repsol]. «Allí vi a gente que se dedicaba a la cocina por pasión, casi sin cobrar, solo por aprender».
Tras trabajar bajo las órdenes de Andoni Luis Aduriz, el chef continuó su formación en otros grandes restaurantes como El Celler de Can Roca [mejor restaurante del mundo en 2013 y 2015], y Noma [mejor restaurante del mundo en 2010, 2011, 2012, 2014 y 2021]. «Siempre tuvo en mente volver a A Coruña». Aunque barajó la idea de abrir su propio restaurante, finalmente apostó por continuar con el legado familiar. La Pulpeira de Melide abrió sus puertas en 2011 en la plaza de España y en este tiempo ha conseguido ser un referente manteniendo la tradición, pero incorporando algunos platos de alta calidad como el tartar de bonito y huevo frito o su salpicón de bogavante nacional.
El pulpo, seña de identidad del cocinero y del restaurante, marca el resto de la carta: «Hago todos mis platos así, con buen producto, buen aliño y cuidando mucho el cocinado», explica. Otro clásico de la cocina gallega, la tortilla de Betanzos, es otro imprescindible de la carta, llegando a ser considerada como una de las mejores de España en el Campeonato Nacional.
Para los chefs del futuro, Gorka deja un consejo: «Que se formen para saber gestionar el negocio, que fue algo que mi generación no tuvo tan en cuenta. La cocina ha mejorado mucho, se ha profesionalizado y ahora ya no vale aquello de trabajar 14 horas».
Oído Cocina
¿Qué plato le evoca a su infancia?
El pulpo.
¿Cuál de sus platos le representa más?
También el pulpo.
¿Cuál es su restaurante favorito de la ciudad?
Tengo tantos que mentiría si dijera uno solo.
¿Cuál es el plato que más disfruta?
Tengo muchos, pero diría la tortilla de O Cabo.
Un placer culpable.
Una hamburguesa de McDonald’s.
Un plato que no le guste comer.
El cordero, cuando no es lechal, me resulta muy fuerte.
Un libro, película o programa sobre cocina.
Tábula-Bacalao de Andoni Luis Aduriz.
Un lugar al que merece la pena viajar para comer.
Portugal. Lo tenemos al lado y no se le presta atención.
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