Avances en el tren a Langosteira: el Puerto contrata la gestión de la circulación para su puesta en marcha

Adif gestiona las vías férreas españolas, pero varias Autoridades Portuarias, entre ellas las de A Coruña, controlan las líneas que dan servicio a sus instalaciones. La red ferroviaria de los muelles coruñeses llega hasta San Diego actualmente, y el año que viene aumentará de manera importante si, según lo previsto, acaba la obra del tren a la dársena de punta Langosteira. El Puerto acaba de sacar a concurso el servicio de coordinación de los trenes en su infraestructura, contando con un «periodo de transición con actividad ferroviaria tanto en el puerto interior como en el exterior». Los expertos reclaman que se mantenga el tren a los muelles interiores indefinidamente, y la documentación del concurso deja abierta la posibilidad, si bien admite que a medio y largo plazo el Puerto «no puede concluir si se mantendrá algún tipo de actividad ferroviaria».

La vía a punta Langosteira «facilitará la expedición y recepción directa de trenes», pero añade que habrá que tenerla en cuenta en los procedimientos de trabajo: se elevará «el nivel de complejidad de las operaciones», y puede ocurrir «un solape de operaciones ferroviarias» en los muelles exteriores y los interiores. La previsión es que la obra acabe en el primer semestre de 2026, para respetar los plazos de los fondos europeos que pagan la obra, y que los trenes empiecen a circular en 2027, tras recibir los permisos necesarios.

La nueva empresa que gestionará los trenes del Puerto sustituirá a la actual, cuyo contrato acaba en agosto de este año, y deberá coordinarse con Adif para garantizar las conexiones entre la red portuaria y la general. Tendrá que planificar itinerarios, controlar sistemas como las señales y notificar las llegadas y salidas de los trenes. También tendrá que registrar y noticiar a la Autoridad Portuaria de todos los datos de circulaciones y maniobras en su zona de servicio.

La compañía deberá dar autorizaciones para los movimientos de los trenes y coordinarlos, así como autorizar los estacionamientos en vías habilitadas, y se encargará de realizar inspecciones de la infraestructura. El contrato incluye una serie de obligaciones menores, como la «colaboración en caso de duda del estado de un trabajador en relación al posible consumo de drogas, alcohol o sustancias psicoactivas». La suma que percibirá por estas labores puede variar si el adjudicatario ofrece rebajas y porque el Puerto le pagará por servicios extraordinarios según demanda, pero el máximo anual es de unos 176.000 euros, a lo que hay que sumar IVA. El contrato durará dos años y podrá prorrogarse tres.

Conexión con la ciudad

La marcha de empresas hacia punta Langosteira eliminará buena parte de la demanda de transporte al puerto interior, pero la Comisión Coruña Marítima, que engloba a Estado, Xunta, Concello, Adif, Puertos del Estado y Autoridad Portuaria y debe definir el futuro de los muelles de Batería a Oza, contempla que permanezca el sector pesquero y que siga habiendo descargas. Y, aunque Adif estudia llevar la actual estación de San Diego a Uxes, los contactos con expertos y entidades de la sociedad civil apuntan a que el consenso pasa por mantener la conexión ferroviaria para mercancías a los muelles interiores, y complementarla con trayectos para viajeros.

Así quedó patente en la reunión organizada por Coruña Marítima este miércoles con vecinos, empresas de transporte, administraciones e ingenieros, en la que el catedrático de ingeniería Miguel Rodríguez Bugarín reclamó mantener la vía férrea, y permitir el transporte de pasajeros con la comarca. Las condiciones del contrato que está sacando el Puerto indican que para dar servicio a la red interior y la de Langosteira se desarrollará un «procedimiento de trabajo específico», en coordinación con el adjudicatario.