A Coruña tiene de límite este año para instalar el quinto contenedor
La conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez, alertó al Concello de A Coruña de que tiene «una fecha límite» para instalar el quinto contenedor, al que está obligado por ley. «Ya está fuera de plazo», indicó Vázquez, que detalló que tiene que tenerlo colocado en las calles «este 2025». Fuentes municipales señalan que se está «trabajando para cumplir con la normativa».
Para la Xunta, esta es una «asignatura pendiente» en la ciudad. Así lo manifestó la conselleira en la presentación de O Tinglado, un mercado de segunda mano que se celebrará en Palexco los días 17 y 18 de mayo. Se habilitarán 70 expositores para la venta de ropa, artículos de decoración, vinilos y libros. Los interesados en vender sus objetos ya pueden inscribirse para acceder a uno de los stands gratuitos a través de la página web de O Tinglado. La adjudicación de espacios se realizará por riguroso orden de recepción de los formularios
Ángeles Vázquez reconoció que «está bien comprar, pero hay que hacerlo con prudencia». Insistió en que los residuos «tienen que pasar de ser un problema a ser una oportunidad». El horario de venta al público de O Tinglado será de 10.30 a 14.00 horas y de 16.00 a 20.30 horas. La iniciativa ya se desarrolló en Vigo y Ferrol.
- El restaurante de A Coruña en el que puedes comer hasta reventar por 13 euros: 2 platos, postre y bebida incluída
- Una librera de A Coruña estalla tras sufrir la estafa de este autor: 'Non vas ver un céntimo
- El Concello de A Coruña detecta 'daños estructurales' en la pasarela entre las estaciones
- Esta es la línea de bus que más emplean los jóvenes de A Coruña, y no es la de Marineda
- Cooperativistas de Xuxán: «Este es un modelo fallido, somos prestamistas de la Xunta»
- Así eran los escaparates de Zara en los inicios del imperio Inditex: Gallinas vivas y el niño que salió corriendo con un conejo
- Xunta y Concello de A Coruña postergan la negociación sobre la terminal de bus a abrir la intermodal
- Y Moncho volvió al Lautrec