La compra de pisos en A Coruña sube un 25% y alcanza las cifras de la burbuja: esta es la causa
Las inmobiliarias de la ciudad explican que los coruñeses que se pueden permitírselo optan por adquirir vivienda, y los que no, por compartirla | Los agentes de la propiedad señalan que los bajos tipos de interés propician pedir hipotecas

Escaparate de una inmobiliaria de A Coruña, con ofertas de compraventa y alquiler. | G. Barreiros/R. A.
Las compraventas de vivienda en A Coruña están viviendo un momento álgido en el arranque de 2025, por encima, incluso, de los datos de la burbuja inmobiliaria. El Ministerio de Vivienda aún no ha publicado datos por municipios, pero el primer trimestre de este año hubo 3.224 transacciones en la provincia, un 25,5% más que en el mismo periodo de 2024, de acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE), la primera vez que se sobrepasa la cifra de las 3.000 entre enero y marzo desde 2008, el año que estalló la burbuja inmobiliaria. El primer trimestre de ese año hubo 3.143 transacciones, menos que ahora, y en 2007 fueron 3.371, pocas más. Tres inmobiliarias consultadas por este diario confirman que están viendo incrementos de ventas en la ciudad, y, junto con los agentes de la propiedad coinciden al identificar un factor crucial: el alza de los alquileres lleva a los que pueden permitírselo a pedir una hipoteca.
Los arrendamientos están viviendo una «subida imparable», en palabras de la presidenta del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de A Coruña, Patricia Vérez, así que los coruñeses «se deciden a comprar» ahora, previendo que los precios de arrendamiento y venta van a seguir incrementándose. Para Vérez, que liga a parte de los aumentos de precio de alquiler a que los propietarios no sacan sus pisos al mercado porque «se encuentran inseguros jurídicamente ante los impagos de la renta de los inquilinos y las medidas del gobierno en cuanto a las prórrogas de las suspensiones de los desahucios», se suman otros factores, como «la situación estable en el empleo» o los tipos de interés relativamente bajos.
«La subida de ventas es real: ha habido muchas transacciones, un subidón del 30 o del 40% con respecto a otros años», resume el agente inmobiliario Mirko Sanhueza, que indica que en el sector se coincide en que la subida del alquiler «ha propiciado una subida inmensa» de la compraventa de pisos. Sanhueza, que trabaja en Urbeko Inmobiliaria, calcula que hay coruñeses que pueden conseguir su propia vivienda abonando cuotas hipotecarias de 640 euros al mes, cuando para arrendar a un piso semejante «vas a pagar 850 o 900».
Pero para acceder a una hipoteca no hay solo que pagar una cuota mensual: también hay que adelantar un porcentaje del precio. En opinión de Sanhueza, los jóvenes de entre 25 y 35 años están dedicando menos dinero a gastos como viajes y «tirando por el ahorro», y hay «muchísima juventud con ganas de comprar», más que hace unos años. «La subida de ventas es increíble, y la demanda es tremenda, pero no hay oferta: el gran problema es la falta de construcción, y hay mucha vivienda vacía, muchísima gente que no puede restaurar o no quiere por miedo a los impagos», resume el agente inmobiliario, que opina que la obra nueva de la ciudad tiene «unos precios de escándalo».
«La gente no puede pagar un alquiler», zanjan fuentes de Rua Inmobiliaria, que explican que si alguien busca un piso en una zona periférica, como Monelos, «por menos de 800 euros no lo encuentra en unas condiciones mínimamente habitables: puede que haya una oferta por 600, pero será un cuarto con ascensor o cosas de ese estilo». Desde el negocio coruñés indican que «por muy poco más te metes en una hipoteca», si bien consideran que los cálculos son menos favorables al hipotecado que los expuestas por Urbeko Inmobiliaria.
«Con los intereses al dos y pico», afirman desde Rua, y aunque los pisos se hayan encarecido, se pueden abonar entre 900 y 1.200 euros de cuota por una vivienda en torno a los 200.000 o 225.000 euros, aunque las condiciones varían según el perfil del cliente. Para los que no pueden acceder a una hipoteca, y mucho menos pagar un piso al contado, la solución son los «alquileres compartidos». A los que no les queda más remedio que meterse en alquiler lo cogen entre amigos, o compañeros de trabajo», indican desde la inmobiliaria. Con un precio medio de los nuevos arrendamientos de 710 euros al mes, de acuerdo con los datos del Observatorio da Vivienda de la Xunta, vivir solo se ha convertido en un imposible para muchos vecinos de la ciudad.
«La subida va a continuar»
En la inmobiliaria coruñesa Será por Casas confirman que hubo un incremento de compraventas en el primer trimestre del año, y, aunque el INE todavía no ofrece datos, señalan que «va a continuar» en el segundo. Fuentes del negocio lo ligan «al aumento del alquiler o a la falta de alquiler», ya esto suman que, aunque falta oferta de vivienda, «hay de nuevo buenas condiciones para la financiación» de hipotecas y los avales ICO del Estado para la adquisición de pisos fomentan las compras entre los jóvenes. «Es una suma de varias cosas, que hacen que la gente se decida», resumen en la inmobiliaria.
Y, si bien el año pasado se veían más compras al contado, de gente de mediana edad y más capacidad de ahorro, en 2025 «hay mucha gente joven comprando» y pidiendo hipotecas. «Somos un país de compradores», defienden desde la inmobiliaria, con una «mentalidad muy diferente a la del resto de Europa», donde hay más querencia por el arrendamiento.
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