La sombra, pieza codiciada ayer en las paradas del bus coruñés

Que los coruñeses no estamos acostumbrados a temperaturas como las vividas ayer en la ciudad es cosa más que sabida. Y una muestra palpable es la situación que se observó en las paradas del bus urbano a la hora punta de las dos de la tarde, en la que el sol apretó con toda su fuerza. Los lugares en los que existía sombra fueron tomados al asalto por las personas que esperaban por la llegada de los buses, ya que las altas temperaturas aconsejaban refugiarse de los rayos solares. La plaza de Ourense fue uno de esos puntos, ya que el paso de numerosas líneas por allí reúne a multitud de usuarios, que se acumularon como sardinas al pie de los árboles para evitar sufrir un sofoco por el intenso calor que soportaban a esa hora.