Exolum prevé poner en funcionamiento su terminal en Langosteira entre 2029 y 2030

La terminal que Exolum, multinacional española dedicada al transporte de combustibles, instalará en el puerto exterior de A Coruña una terminal que se pondrá en funcionamiento «en 2029 o 2030». Así lo detalló el CEO de la compañía, Javier Goñi, quien indicó que la inversión es de_«100 millones de euros». Con una superficie de 120.000 metros cuadrados, se convertirá en la mayor concesión del puerto exterior .

Se trata de una terminal para almacenar, mezclar y expedir líquidos y que albergará desde hidrocarburos tradicionales a productos ligados a energías verdes. Su capacidad de almacenamiento será de 165.000 metros cúbicos. «Lo estamos planteando no solo para productos petrolíferos de hoy sino también para biocombustibles, para productos como el etanol, el biotanol, el metanol verde o el amoníaco renovable», explicó Goñi, quien también destacó el «perfil multimodal» de proyecto, pues «va a ser una instalación muy flexible con un punto de descarga de buques, con instalación ferroviaria y con instalación para la carga de cisternas». Será «muy sostenible, con una huella de CO2 bajísima». Aseguró que no hay precedentes de este tipo en España e insistió en que es «una instalación punterísima de primer nivel». «Queremos ser un facilitador de transición energética», manifestó, a la vez que destacó que esta infraestructura permitirá a Galicia desarrollar nuevos mercados.

Las obras para la construcción de esta terminal generarán, según el CEO de la compañía, «centenares de puestos de trabajo», mientras que cuando se ponga en marcha habrá «30 puestos permanentes». Exolum ya tiene dos instalaciones en Bens y Vigo.

Para el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, este es «un proyecto fundamental y estratégico para Galicia» porque «supone abrir a todas las empresas gallegas y de fuera un mercado que en Europa se está consolidando y que en España está aterrizando». Señaló que esta terminal «consolida la apuesta por un puerto exterior que demandan empresas que necesitan esas instalaciones y esa accesibilidad». Rueda aseguró que será una gran oportunidad para los créditos de carbono, sobre los que la Xunta acaba de poner en marcha un mercado voluntario para compensar emisiones con proyectos que reduzcan o absorban CO2. «En tres o cuatro años será algo que demanden y necesiten muchísimas empresas», agregó, mientras que informó de que el Gobierno gallego será «exigente con el cumplimiento de la normativa»