Si no lo leo no lo creo
Tarde de Samaín a bocinazos en Orillamar
ANTÓN PERULEIRO
Lo tradicional en la jornada del Samaín por parte de los más pequeños es recorrer las calles al grito de «truco o trato» para hacerse con el mayor número posible de dulces. Pero un grupo de niños optó el pasado viernes por una diversión más original, ya que se subieron a las bicicletas de la estación de BiciCoruña —un pasatiempo bastante habitual entre la juventud coruñesa— y desde allí esperaron a que pasaran los coches para ponerse a gritar a todo trapo a los conductores que tocaran sus bocinas. La verdad es que muchos de ellos lo hicieron, con la consiguiente satisfacción de los chavales, aunque más de un automovilista se llevaría el susto de la noche de Samaín.
- Julio Llamazares, en A Coruña: «España será normal cuando se hable de la Guerra Civil como un pasaje histórico»
- El Supremo hace pagar al Concello de A Coruña por prorrogar una concesión sin límites
- Promotores de Visma alejan los nuevos edificios de Os Mariñeiros
- Catorce metros de memoria de A Coruña en un almacén: las primeras imágenes de la estatua a los Hermanos de la Lejía
- Vogue convierte las calles de A Coruña en escenario de su editorial de otoño
- La nueva estación de autobuses de A Coruña encara la recta final de la obra con la estructura acabada
- A Coruña antes de Marineda City: cuando la ciudad inauguró su primer, y polémico, centro comercial del siglo
- Uno de los planes más esperados de la Navidad regresa a A Coruña