Desde que se licenció hace dos años por la ESAD (antes había culminado Historia da Arte), Fernando Tato no ha hecho más que trabajar y seguir formándose. Como resultado, ha logrado un papel en la serie más longeva de la pantalla gallega, Libro de familia, donde interpreta a Óscar.

También ha trabajado con Teatro do Noroeste para el espectáculo Glass City y recientemente ha estrenado en Madrid Playing Wilder en Casa de Vacas. Tato ha hecho suyo el lema del director Etelvino Vázquez que reza que "no hay nada que oxide antes que un actor que no hace nada". Por ello, no ha dejado de recibir clases con dos profesoras que ha encontrado en Madrid y de las que no piensa despegarse nunca.

Asegura este joven actor que su vocación por el teatro le llegó de forma "tardía. Siempre me gustó mucho el cine y el teatro pero nunca había pensado que me podía dedicar a eso. Cuando empecé a hacer prácticas tras estudiar Historia da Arte decidí que eso no era para mí; embarqué rumbo a Vigo, a la ESAD, en el año en que abrió". Antes incluso de finalizar los estudios, ya comenzó a trabajar con compañías gallegas, incluyendo su fichaje para el Romeo e Xulieta de Teatro do Noroeste. Un día trabajando en Lugo, recibió una llamada para un casting y fue así como entró en las series Matalobos (una actuación en un episodio) y Libro de familia (personaje fijo). Tato asegura sentirse "muy afortunado. Tengo compañeros que no están tan bien". Para los que estén estudiando, recomienda: "buscar, estudiar y trabajar".