El cineasta coruñés Oliver Laxe se muestra feliz de que su segundo largometraje, Las mimosas, haya sido seleccionada para participar en la Semana de la Crítica del Festival de Cannes, que se celebrará entre los próximos 12 y 20 de mayo. "Es dificilísimo entrar ahí y somos conscientes de que esto ya es un éxito muy grande", aseguró ayer tras conocer la noticia. Se trata de la segunda vez que este director coruñés „residente en Marruecos„ es seleccionado para la cita de Cannes y, ahora, en una sección donde "cuidan bastante" el cine "diferente", según asegura el realizador.

El director, hijo de emigrantes gallegos y nacido en París en 1982, sigue en Las mimosas a una caravana de personas que atraviesan las montañas del Alto Atlas marroquí para llevar el cadáver de un maestro sufí hasta su pueblo, donde quería ser enterrado.

"Es una cinta de aventuras, pura ficción, y a la vez un relato épico en dos vertientes: una, exterior, el recorrido de la propia caravana, y otra, interior, la que viven algunos de los personajes que se encuentran en un momento de su vida, en una suerte de transformación. También habla de la fe", afirma.

Laxe cree que la película ha convencido a Cannes, porque "es anacrónica y afirmativa y se alinea con un cierto linaje de cine", opina.

La cinta de Laxe es uno de los siete largometrajes en competición en esa sección paralela del certamen cinematográfico, entre los que habrá obras de Francia, Turquía, Israel, el Líbano y Singapur.