Varios años de investigación, un plano realizado por un monje franciscano y la confirmación de un georradar han sido las herramientas claves para identificar el lugar exacto en el que se encuentra la primera tumba de Cristóbal Colón en Valladolid.

El resultado de las investigaciones, avanzadas este miércoles y presentadas este jueves al completo en el Museo Naval de Madrid, han dado como resultado que la primera tumba del marinero se encontraría en una arteria comercial del centro de Valladolid, la calle Constitución. Dos terceras partes de la capilla estarían en la calle y el resto debajo de donde hoy está ubicado un banco.

"Faltaría hacer una prospección pero el georradar marca la zona, es una certeza bastante alta. No parece que haya otra posibilidad razonable", ha explicado el arquitecto Juan Luis Sanz, que ha liderado el proyecto junto al historiador Marcial Castro.

La investigación surgió a raíz de otra investigación de Castro, que en 2005 identificó genéticamente los restos del descubridor.

Al abrir el sepulcro -que actualmente se encuentra en la catedral de Sevilla- se encontraron también restos de hilos de oro, plata, carbón vegetal, plomo, ladrillo y mortero, y vieron interesante descubrir el lugar exacto de su primera tumba para ver si los restos guardaban alguna relación.

"Para sorpresa mía, no solamente hemos podido averiguar la zona sino que también hemos ubicado la capilla. No ha sido fácil pero ha sido muy bonito", ha dicho Castro.

han dado como resultado que la primera tumba del marinero se encontraría en una arteria comercial del centro de Valladolid, la calle Constitución. Dos terceras partes de la capilla estarían en la calle y el resto debajo de donde hoy está ubicado un banco.

Colón murió en Valladolid en 1506, donde se encontraba con la corte de Fernando el Católico. Fue enterrado en el convento de San Francisco de la ciudad, aunque posiblemente sin el conocimiento de los dueños de la capilla, ha explicado.

Los restos del descubridor viajarían años después a la Cartuja de Sevilla, de allí a República Dominicana y La Habana, para luego volver a Sevilla, donde se encuentran hoy en día.

Los investigadores han recreado el convento de San Francisco, hoy desaparecido, y ubicado muy cerca de la plaza Mayor de Valladolid.

La hipótesis de la zona surgió en 2005 pero faltaban datos por confirmar. En 2020, el Ayuntamiento de Valladolid hizo una excavación con motivo de la búsqueda de los restos óseos de un antiguo príncipe rebelde irlandés -"Red" Hugh O'Donnell-, y encontró un muro de una de las capillas del convento. Con ese dato el georradar confirmó el resto de muros.

La investigación también ha revelado que en la misma calle estarían ubicadas las capillas de otras personas ilustres del Renacimiento español: Fray Antonio de Guevara (1451-1602), obispo de Mondoñedo y escritor de enorme importancia en la época, y Hernando de Cabezón, organista del rey (1541-1602).

"Hacer una excavación en la zona es extraordinariamente caro. Parece que hay algo metálico en el centro de la capilla que nos llama mucha la atención. No me cabe la menor duda de que si en algún momento hacen una obra, aprovecharán para hacer una excavación", ha dicho Castro.