El Sevilla, cauteloso

El Sevilla afrontará una nueva eliminatoria previa de Liga de Campeones ante el "peligroso" Sporting de Braga con la esperanza de lograr el mejor resultado posible para afrontar con garantías de clasificación el partido de vuelta en el Sánchez Pizjuán.

El Sporting de Braga, un pequeño club en ascensión que acabó la pasada temporada segundo en la Liga portuguesa, practica un fútbol eficaz basado en la presión y la solidez defensiva y llega al duelo frente al Sevilla con las armas afiladas.

Los Guerreros del Miño se presentarán con la autoestima alta al vencer su último compromiso liguero frente al Portimonense (3-1) y con "hambre" de hacer historia, ya que nunca han logrado clasificarse para la máxima competición continental.

Después de un sensacional curso en el que disputaron la Liga al Benfica hasta el último partido, los hombres que dirige Domingos Paciencia han dado señales positivas en sus primeros choques oficiales.

En la anterior eliminatoria de acceso a la Champions, liquidaron a un histórico del fútbol europeo, el Celtic de Glasgow, al que endosaron tres goles en el partido ida.

A pesar de haber perdido jugadores clave en los últimos meses, entre ellos el portero de la selección lusa Eduardo, el medio Hugo Viana o el lateral brasileño Evaldo, el conjunto ha mantenido su aspecto rocoso y competitivo que funciona al margen de las individualidades.

Su once titular, cuyo dibujo táctico suele oscilar entre el 4-5-1 y el 4-4-2, se adapta a las necesidades de cada partido y suele contar con un elevado número de jugadores brasileños. El central peruano Alberto Rodríguez; los brasileños Vandinho y Alan; y el medio uruguayo Luis Aguiar son algunos de los jugadores destacados del plantel, que recientemente incorporó al portero brasileño Felipe (ex Corinthians) y al delantero Elton (ex Vasco da Gama).

Una Copa de Portugal (1966) y la Copa Intertoto (2008) son los mayores logros del Braga, que aspira en Portugal a discutir la supremacía histórica del Benfica, Oporto y Sporting de Lisboa.

Por su parte, el conjunto sevillista viaja con la moral por las nubes después de solventar con éxito el partido de ida de la Supercopa de España ante el Barcelona, al que superaron por tres goles a uno en una segunda parte excepcional. Los jugadores que entrena Antonio Álvarez afrontan su tercera eliminatoria previa de Champions en los últimos cuatro años, todas ellas superadas, y son conscientes de la urgente necesidad de alcanzar la fase de grupos para cuadrar su presupuesto y aspirar a superar la barrera de los octavos de final.

Álvarez podrá contar con el defensa Fernando Navarro, recuperado de su lesión, pero deberá prescindir del lateral derecho francés Konko, con una sobrecarga muscular, que se une al centrocampista italiano Tiberio Guarente y al defensa serbio Ivica Dragutinovic en la lista de lesionados.