El santiagués Pedro Nimo cumplirá hoy su sueño de disputar un Campeonato del Mundo. Lo hará a partir de las 11.45 horas en la prueba del maratón y con un objetivo modesto de conseguir atravesar la meta situada en la Puerta de Brandemburgo tras los más de 42 kilómetros de recorrido.

No competirá en plenitud de condiciones. Una lesión en la espalda que arrastra desde hace unos meses no le ha permitido entrenar en las últimas semanas y le ha obligado a infiltrarse hace dos días con el fin de aguantar el dolor. Incluso los médicos han tenido que pedir permiso para que se le pueda tratar con corticoides.

"El dolor es fuerte, pero en mi cabeza tengo claro que quiero llegar a meta, que voy a llegar a meta. Creo que he trabajado mucho y muy duro, y hay demasiadas personas detrás apoyándome como para bajar ahora los brazos", confesó el propio corredor en su página web hace dos días. Y apuntilló: "Hay que morir matando".

Hasta el momento, Nimo sólo ha sido capaz de terminar en una ocasión el maratón. Lo hizo en Viena, con una marca de 2.12.10, lo que le valió un billete directo para Berlín y para debutar con la camiseta de la selección española en una gran cita internacional.

Acompañará a Chema Martínez y a Rafael Iglesias, para los que sólo tiene buenas palabras: "Mis compañeros de equipo se están volcando conmigo y me apoyan a muerte. Somos un equipo. Sé que cuando acabe la prueba me estarán esperando emocionados por haber luchado juntos".

No sólo recibirá ese apoyo. El santiagués ha revelado que cuando le falten fuerzas se acordará de todos los atletas populares gallegos y que eso le ayudará a seguir hacia delante. Además, lucirá un crespón negro en su camiseta en recuerdo de Guillermo Renda, un corredor fallecido en Arteixo al ser atropellado por un coche mientras se entrenaba.

Por delante le espera un circuito por las calles berlinesas de diez kilómetros y al que tendrá que dar cuatro vueltas. En frente, el pelotón africano, que encarecerá el ritmo y el nivel de la prueba. "Está claro que es la carrera más importante de mi vida", afirma el atleta, aunque simplemente con estar allí "ya he cumplido mi sueño".