El isleño, al igual que Manuel Pablo y Sergio, salió airoso dos veces de Chamartín: primero, en la final de Copa del Centenariazo (2002), y dos años después en la Liga (0-1, con gol de Luque). El Flaco sabe lo difícil que es sorprender al Madrid en su campo, pero está convencido de que el Deportivo cuenta con argumentos suficientes como para tumbar al equipo blanco: "Nosotros también tenemos gente de nivel como para ganar al Madrid. Si no creemos que podemos vencer allí, mejor quedarnos en A Coruña".

El grancanario se perfila como el elegido de Miguel Ángel Lotina para guiar el ataque blanquiazul en el Bernabéu. El técnico valora la buena pretemporada que ha hecho su jugador más talentoso. "Estoy contento porque me siento muy bien y muy cómodo -explica Valerón-. Me veo que puedo seguir mejorando físicamente a medida que vaya cogiendo ritmo de competición. Estoy aquí para ayudar y para hacer todo lo posible por el equipo". Su motivación, como la del resto de sus compañeros, será "máxima" en Chamartín: "Jugamos en un buen estadio, contra un buen equipo, y eso nos va a ayudar a dar lo mejor de nosotros. Habrá que salir a hacer lo que sabemos para intentar ponérselo complicado".

Hace siete años y medio el Flaco saboreó el título de Copa derrotando al Madrid en su campo el día en el que el club blanco cumplía cien años. Igual que ahora, entonces el equipo merengue era el claro favorito en todas las apuestas. Sin embargo, Valerón prefiere evitar las comparaciones. Entiende que la cita de mañana es "totalmente distinta" a la que vivió en primera persona el 6 de marzo de 2002. "Son partidos totalmente diferentes, con jugadores diferentes. Además, entonces estaba en juego un título y ahora lo que nos jugamos son tres puntos", argumenta el mediapunta.

En su opinión, es mejor que la visita al Bernabéu llegue en la primera jornada porque el Madrid se ha reforzado con muchas incorporaciones y todavía necesita un cierto margen de tiempo para hacer "pequeños ajustes". Valerón considera que el equipo blanco será quien lleve el peso del partido, al menos en el tramo inicial, aunque no renuncia a hacerse con el mando del encuentro. "En la medida en la que podamos, nosotros también intentaremos tener el balón", concluyó tras la sesión de ayer en Riazor.