El Coinasa Liceo se impuso al Cerceda con dificultad, en un partido en el que los cuatro último goles llegaron por medio de otras tantas faltas directas, que permitieron que el partido se mantuviese vivo prácticamente hasta el final. A los liceístas les valía con el empate para revalidar el título conseguido en la primera edición del torneo, de ahí que el gol de Martín Payero, en el minuto final del encuentro, le pusiese ya la puntilla.

El choque fue muy disputado, pero carente de tensión, propio entre dos equipos que son hermanos, aunque en la recta final los ánimos se calentaron de alguna manera debido a la posibilidad que tenían los jugadores de Juan Copa de igualar y superar a los que dirige Carlos Gil. Ya que desde el primer gol de Toni Pérez, los locales estuvieron muy centrados en el encuentro y no dejaron que los liceístas sentenciasen con facilidad. Sólo lo consiguieron con el último tanto, que anotó el argentino Payero cuando ya no había tiempo prácticamente para más.