Terremoto en el ciclismo español: Alberto Contador dio positivo durante el pasado Tour de Francia; espanto en el ciclismo gallego: Ezequiel Mosquera y David García serán investigados por la aparición de una sustancia sospechosa en muestras tomadas durante la última Vuelta a España. Los afectados defienden su inocencia. Creen que se demostrará de forma adecuada. Entre tanto, el pelotón se tambalea.

El positivo de Contador irrumpió en los medios en la noche del miércoles. Un canal alemán lo anunció. La COPE se hizo eco. En una prueba de orina efectuada el 21 de julio había aparecido clembuterol. Fue una toma durante la jornada de descanso previa a la subida al Tourmalet. La cantidad es mínima (50 picogramos). La Unión Ciclista Internacional (UCI) no se lo comunicó al corredor hasta el 24 de agosto y lo ha suspendido de forma temporal mientras se investiga el caso.

Alberto Contador ha proclamado que está limpio y se muestra dispuesto a colaborar. El madrileño maneja una explicación: el positivo se debe a una contaminación alimentaria, a una carne procedente de España que consumieron varios ciclistas del Astana. "No puedo tolerar que haya sanción", afirma el tricampeón del Tour.

"Espero que sea inocente y creo que ahora tiene el derecho a defenderse", comentó Andy Schleck en Twitter. "Es una situación desgraciada. No creo que se haya dopado", afirma Bjarne Riis, el director del Saxo Bank, con el que ha firmado hasta 2012. Pierre Bordry, ex presidente de la Agencia Francesa contra el Dopaje, asegura por contra que la teoría de la intoxicación alimentaria es "complicada de creer. Poco importa que la cantidad sea pequeña. El clembuterol está en la lista de productos prohibidos".

Estaba el ciclismo desperezándose con esta bomba cuando estalló otra, de inmenso calado para el ciclismo gallego: Ezequiel Mosquera y otro ciclista del Xacobeo también habían dado positivo durante la Vuelta a España. Lo anunció José Ramón de la Morena en un programa de la cadena SER.

Con el paso de las horas se conoció la identidad del compañero de Ezequiel, que resultó ser David García. Y se supo también que los casos de positivo no eran tales. En realidad se ha detectado hidroxietil almidón en la orina de Mosquera y David García recogida al final de la etapa del 16 de septiembre de la Vuelta a España. Esta sustancia no está incluida en la lista de productos dopantes, pero sí está prohibida.

El de Teo y el de Marín no han sido suspendidos. La UCI ha comunicado los resultados a la Federación Española y la Agencia Antidopaje. Y estos organismos han abierto un expediente informativo a ambos. El objetivo es averiguar si el hidroxietil fue empleado como diurético para adelgazar. En tal caso, la sanción sería leve, de tres meses de suspensión como máximo e incluso podría quedarse en una advertencia administrativa sin consecuencias para la clasificación de la Vuelta. Pero el hidroxietil también se emplea como enmascarador de productos dopantes. Si fuese así los podrían inhabilitar durante dos años.

La jornada resultó dramática. David García festejaba ayer sus 33 años. Estaba a punto de firmar con un equipo pro-tour. Su mujer sufrió un ataque de ansiedad. Él negó cualquier engaño en una nota de prensa. Ezequiel, por su parte, ofreció una rueda de prensa. Hasta las 13.00 horas, mucho después de que la noticia fuese pública, no tuvo un comunicado oficial de lo que sucedía a través de una aplicación informática para ciclistas profesionales. "Tengo la conciencia súper tranquila", afirmó.

En los tres casos, el proceso debía garantizar la confidencialidad de los hechos hasta que todas las pruebas ofreciesen una conclusión. Ya no será así. Los laboratorios trabajarán bajo la escrutadora mirada del público. El ciclismo tiembla y vuelve a asomarse al abismo ahora que levantaba la cabeza.