España se proclamó campeona del Europeo sub19 por quinta ocasión en su historia tras vencer ayer a República Checa por 2-3 en la prórroga, gracias a una gran actuación de Paco Alcácer, quien se apuntó un doblete y propició que el equipo de Ginés Meléndez consiguiera la remontada. La selección española es la primera que conquista el torneo sub 19 cinco veces, tres bajo la dirección de Meléndez, lo que le permite quedarse en propiedad con el trofeo.

Con la incorporación de Albert Blázquez en lugar del lesionado Daniel Carvajal, el seleccionador español presentó lo mejor de su plantilla para disputar la gran final, con el capitán Pablo Sarabia, el centrocampista Gerard Deulofeu y el goleador Álvaro Morata como principales referentes en el equipo. El primer tiempo del duelo se caracterizó por la igualdad de fuerzas, pues España se olvidó de emplear su tradicional estilo de juego, que consiste en controlar el balón y desplazarlo por todo el césped, y recurrió a los balones largos, mientras que la República Checa se mostró sólida en el centro del campo y ganó terreno.

España apretó durante la recta final del primer periodo y estuvo cerca de abrir el marcador a través de Juanmi, cuyo remate de cabeza acabó en las manos de Tomas Koubek (m.23), Sarabia, quien tras hacerle un túnel a Jelecek intentó sorprender al portero con un tiro a primer poste (m.26), y Morata, luego de un error defensivo (m.34).

En el segundo tiempo el equipo español se lanzó al frente desde el primer instante, pero la República Checa dio el primer golpe. Krejci sacó un zurdazo cruzado desde la frontal, ante la marca de Blázquez y Gómez, que batió a Edgar Badía (m.52). Pero el 1-0 parcial, lejos de actuar en contra de los de Ginés Meléndez, sirvió para que pisaran el acelerador. La entrada de Paco Alcácer imprimió fuerza a la ofensiva española e incluso tuvo tres oportunidades de marcar.

España forzó la prórroga gracias a un gol de Aurtenetxe (m.85), quien desvió un tiro de Pardo desde la frontal. Pese a la fatiga, los dos equipos brindaron su máximo esfuerzo y se enfrascaron en un vaivén en el que el conjunto español tuvo las acciones más claras. Sin embargo, los checos volvieron a irse al frente en el marcador por medio de Lacha, quien marcó tras un centro de Krejci por la izquierda (m.97).

Pero la figura de Paco Alcácer apareció para resolver el encuentro. Primero anotó el gol del 2-2 (m.108) tras un pase de Morata de cabeza, y a cinco minutos del final de la prórroga fusiló con la derecha a Koubek tras controlar con el pecho un pase de Pardo.